- Elevar las patentes mineras (que se pagan por hectárea) para aquellas concesiones metálicas, no metálicas y de exploración sobre 5.000 hectáreas.

- Establecer por ley que todas las empresas de la gran minería se constituyan en sociedades anónimas abiertas o se sometan a las obligaciones de información pública aplicables a éstas.

- Perfeccionar la Reforma de Mercado de Capitales II para promover la colocación de acciones de primera emisión de las empresas mineras en la bolsa nacional.

- Crear un nuevo instrumento de invariabilidad tributaria para la inversión extranjera. Deben renunciar a los beneficios del artículo 11 bis del DL 600 y someterse a las reglas generales de tributación sobre retiros establecidos en 2001. Deben cancelar una sobre-tasa anual sobre el impuesto adicional a la renta, de 3% sobre la utilidad bruta, no renunciable.

Con esta propuesta se pretendía recaudar US$ 247 millones. Lo que se desglosa en US$ 42 millones por alza de patentes, US$ 85 millones por el 3% de invariabilidad tributaria y US$ 120 millones en nuevos proyectos mineros.