miércoles, 18 de abril de 2007
KARIN NIKLANDER
Economía y Negocios, El Mercurio
Proyecto de depreciación acelerada fue rechazado por 14-21 y ahora irá a comisión mixta. Reacción del titular de Hacienda: "Inexplicable" votación en contra de una propuesta de la Presidenta.
Relacionadas Variadas opiniones generó en el sector empresarial el rechazo en el Senado al proyecto sobre depreciación acelerada. Los ministros Andrés Velasco, Alejandro Ferreiro y José Antonio Viera-Gallo, y el director de Presupuestos, Alberto Arenas, inician reuniones en el Congreso con parlamentarios de la Concertación -entre ellos, Camilo Escalona, Fernando Flores, Juan Pablo Letelier, Guillermo Vásquez y Carolina Tohá- para buscar apoyo al proyecto y al protocolo de acuerdo que acompañará la iniciativa.
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Pese al gran despliegue que hizo ayer el Gobierno para aprobar el proyecto de ley que establece un período extraordinario de depreciación acelerada, los votos de la oposición y de parte de la Concertación terminaron propinándole una dura derrota a la iniciativa. Según argumentaron, ésta no presentaba beneficios para las pymes, sino sólo para las grandes empresas.
La medida fue rechazada por 21 votos en contra, de los cuales 18 fueron del bloque de la Alianza y tres de los senadores oficialistas Nelson Ávila (PRSD), Carlos Ominami (PS) y Adolfo Zaldívar (DC). Los 14 votos a favor fueron del resto de los parlamentarios concertacionistas, cifra que no fue mayor por la ausencia del país de tres legisladores
Derrota política
Como el texto había sido aprobado por la Cámara, ahora deberá pasar a comisión mixta, en dos semanas más. Este traspié es una fuerte derrota para el Gobierno, y en particular para el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, quien diseñó esta medida como la estrella del plan Chile Invierte.
Las intensas gestiones de Velasco y los ministros secretario general de la Presidencia, José Antonio Viera-Gallo, y de Economía, Alejandro Ferreiro, con la Alianza no bastaron para sacar adelante el proyecto. Incluso, a última hora introdujeron una indicación que establece que el beneficio de la depreciación
acelerada se hará permanente para las empresas que vendan hasta 100.000 UF anuales.Reacciones en sector empresarial
Desde Caracas, el presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Alfredo Ovalle, expresó su confianza en que finalmente el proyecto sea aprobado en Comisión Mixta, porque es positivo para la inversión y el crecimiento.
Las ramas de la CPC se reunieron el viernes con la Presidenta Bachelet para respaldar el proyecto. Ovalle y el secretario general de la Sofofa, Andrés Concha, encabezaron el lobby con parlamentarios de la Alianza, intento que resultó fallido.
"La única manera de crecer es invertir, pero también entendemos que eso no basta, y que hay que tomar otras medidas que beneficien al 99% de las empresas, como las propuestas de desregulación en materia tributaria, laboral, medioambiental y sanitaria que la Cámara ha entregado a las autoridades", dijo el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Pedro Corona.
En el rechazo al proyecto, Corona ve una demostración de fuerza del Parlamento para que el Gobierno dé soluciones reales a las pymes y a las regiones, y si esto se traduce en medidas para que las pymes tengan crecimiento y desarrollo, piensa que puede ser positivo. "Esto es malo para la economía", planteó el economista Alejandro Alarcón, de la Asociación de Bancos. Recuerda que el mercado elevó en al menos dos décimas el crecimiento para este año sólo gracias a esa medida.
Andrés Ovalle, presidente de la Confederación Nacional de la Pequeña y Mediana Empresa (Conapyme), opina que el ministro Andrés Velasco "se compró el rechazo por la actitud poco flexible que ha tenido". Renegociación de deudas, acceso a financiamiento e igualdad de condiciones para competir son las medidas que pide el sector.
"Ojalá que el ministro haya leído el mensaje que le ha dado el Senado y que aterrice", expresó.
El presidente del gremio metalúrgico y metalmecánico, Asimet, Arturo Lyon, lamentó que por motivaciones políticas no se haya apoyado un proyecto que va en la dirección de fomentar la inversión para las grandes, medianas y pequeñas empresas. En el sector industrial defienden el beneficio del proyecto para las pymes, ya que un emprendedor que parte necesita invertir en maquinarias, tornos u otros. Pero al dirigente del comercio detallista, Rafael Cumsille, le pareció bien el rechazo. Dice que el proyecto no favorece a las pymes, pues no usan la depreciación acelerada vigente para no tener pérdidas tributarias que limiten su acceso a financiamiento..
Además, el Gobierno propuso a los presidentes de los partidos de la Concertación y de la Alianza la firma de un protocolo con compromisos para mejorar la situación de las pymes. Entre ellos están el estatuto del sector; condiciones transitorias especiales que favorezcan la reprogramación de las deudas con el fisco; mejor acceso al financiamiento y fórmulas orientadas a reducir el impacto del impuesto de timbres y estampillas.
Los únicos que no fueron invitados a ese debate fueron los senadores disidentes de la Concertación, quienes después criticaron la política económica de Hacienda.
El Gobierno privilegió las negociaciones con la Alianza, pues aunque Ávila, Ominami y Zaldívar hubieran votado a favor, el Ejecutivo no hubiera reunido los votos necesarios, por la ausencia del país de Jorge Pizarro (DC), Jaime Naranjo (PS) y Alejandro Navarro (PS).
Duro debate
El debate en sala lo inició Ávila. Justificó su decisión diciendo que este tipo de proyectos "nos hacen traicionar nuestros principios" y añadió que, cuando termine el Gobierno, "Velasco posiblemente tome sus maletas y regrese a Harvard, pero los chilenos quedaremos nadando en un mar de excreciones".
El senador Ominami dijo que el proyecto está basado en un diagnóstico equivocado de las pymes y que el costo fiscal (de US$ 540 millones) es excesivo considerando que, según sus datos, dos de las empresas que obtendrán mayores beneficios son Lan Chile y Pascua Lama.
Zaldívar planteó que espera que "lo que ha ocurrido hoy (ayer) abra los ojos a quienes los deben tener abiertos".
En la Alianza, los senadores Hernán Larraín (UDI) y José García (RN) valoraron el cambio de actitud del Gobierno en la última semana, al tratar de buscar medidas adicionales para las pymes. Y aunque no aceptaron el acuerdo, pidieron al Ejecutivo implementar de todas maneras el contenido del protocolo.
El senador Pablo Longueira sostuvo que "aquí ocurrió una genialidad política" y agradeció a los tres senadores oficialistas.
Al término de la sesión, Velasco quiso enfrentar a la disidencia directamente con Bachelet. Dijo que es "inexplicable" que parlamentarios de la Concertación votaran en contra de la iniciativa de la Presidenta, y apuntó que "es muy importante no sacar ventajas chicas", en alusión a la derecha. "Se ha privilegiado una ventaja chica, de corto plazo, por sobre los beneficios que habría tenido la pequeña y mediana empresa y sobre las ventajas de crecimiento", comentó.
Tensa jornada
Ministros se reúnen con el presidente del Senado, Eduardo Frei, y con los presidentes de los partidos de la Concertación: Soledad Alvear (DC), José A. Gómez (PRSD), Camilo Escalona y la vicepresidenta del PPD, Carolina Tohá. Parlamentarios de la Concertación que integran la Comisión de Hacienda de la Cámara se reúnen con los ministros.
Los senadores José García (RN) y Hernán Larraín (UDI) se juntan con Velasco para acercar posiciones. Dado que no lo logran, se dan plazo hasta las 15:30 para continuar las conversaciones.
Puntualmente, los senadores de la Alianza concurren a la sala de ministros, donde le comunican a Velasco que debido a que no se han tomado en cuenta sus peticiones (eliminar timbres y estampillas, que tributen cuando hacen retiro de utilidades no en las reinvertidas, disminución de las tasas de interés por parte de Tesorería, por ejemplo), votarán en contra la iniciativa.
Velasco se encuentra con parlamentarios de la Concertación para firmar el protocolo de acuerdo que acompañe al proyecto de depreciación.
A las 17:00 horas se inicia el debate. Las primeras intervenciones fueron en contra. Intervienen Velasco y Ferreiro, quienes dan cuenta de que el Gobierno está preocupado por las pymes.
Tras el debate, el Gobierno pierde el proyecto, luego que 21 senadores votaran en contra y sólo 14 lo aprobaran..
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