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Fondos mutuos Un fondo mutuo está constituido por aportes de dinero que hacen empresas y personas, con lo cual se logra constituir un gran fondo común, el cual es manejado e invertido por una administradora, de acuerdo a una política de inversión preestablecida. De esta manera, la ganancia para los partícipes del fondo dependerá de cuánto renten los instrumentos en que ha invertido el fondo. La gran ventaja de los fondos mutuos es que los recursos están manejados por administradoras que poseen departamentos de estudios que sondean permanentemente las posibilidades del mercado tanto en Chile como en el extranjero. Tipo
de instrumentos En Chile, todos los fondos son “abiertos”, es decir, los partícipes no necesitarán ir al mercado para liquidar su inversión en caso de que decidan retirarse, sino que la administradora del fondo será la encargada de comprar la participación de esa persona. ¿Dónde
ponen su dinero? Quienes deseen rescatar su dinero de un fondo de renta variable, tienen dos días para hacerlo —en el caso de inversiones en instrumentos nacionales— y de cuatro días —si están invertidos en el extranjero. En cambio, los de renta fija trabajan con instrumentos que entregan una rentabilidad conocida (como papeles del Banco Central, letras hipotecarias, depósitos a plazo, etcétera). Por lo general, estas inversiones se mueven correlativamente con la trayectoria de la tasa de interés. Por esta razón, se dice que la renta fija entrega una rentabilidad conocida. Podemos ver un ejemplo cuando el fondo tiene invertida una parte importante de sus recursos en Pagarés Reajustables del Banco Central con pago en Cupones a 8 años con una tasa de 6,5%. Si la tasa de mercado para estos instrumentos empieza a subir, ese instrumento irá bajando de precio, con lo cual el valor de las cuotas de ese fondo también caerá. Si bien entrega una rentabilidad conocida y más estable que en el caso de la renta variable, la ganancia no está asegurada. Incluso, en determinadas circunstancias del mercado, puede generar pérdidas. Los más seguros, pero que dan una menor rentabilidad, invierten en instrumentos de deuda a corto plazo —entre 90 y 365 días— como depósitos a plazo y pagarés del Banco Central. En el caso de las inversiones en instrumentos de deuda a mediano y largo plazo, los fondos constituyen sus fondos con instrumentos de mayor duración, como bonos de empresas, bonos de bancos y letras hipotecarias cuyo vencimiento sea superior a un año. El riesgo de los fondos mutuos de renta fija a mediano y largo plazo sigue siendo acotado. Las ganancias dependen de la trayectoria que sigan las tasas de más largo plazo y se determinan por las fuerzas del mercado. En el caso de los fondos internacionales, hay que considerar, además, los riesgos del tipo de cambio. Por último,
se tienen los fondos mutuos mixtos que invierten en instrumentos de
deuda a corto, mediano y largo plazo.
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