Ir al inicio
Términos y condiciones de la información © El Mercurio S.A.P.

Cuentas de ahorro a plazo

La cuenta de ahorro a plazo es un instrumento donde la persona deposita en un banco una cierta cantidad de dinero donde la institución financiera va aportando un reajuste e intereses por el capital ahorrado.

Hoy, las personas pueden manejar sus cuentas de ahorro con tarjetas magnéticas, operando a través de cajeros automáticos. Sin embargo, todavía se utiliza la clásica libreta de ahorro (es posible que una cuenta de ahorro ligada a una libreta pague menos intereses, pues para el banco representa un costo menor que el cliente se autoatienda).

Las cuentas de ahorro son especialmente recomendadas para personas que poseen ahorros de hasta $ 5 millones y desean una inversión segura y con bajo riesgo, lo que no quiere decir que se excluya a quienes tienen más recursos.

Es un instrumento apropiado para iniciar un ahorro a largo plazo.

Las ganancias de una cuenta de ahorro provienen de dos fuentes: los intereses del capital ahorrado y los reajustes.

Intereses
La ganancia que los ahorrantes puedan obtener de esta alternativa depende de los tipos de cuenta: “Giro Incondicional” y “Giro Diferido”, las que se diferencian por la cantidad de giros permitidos al año. Sin embargo, en ambos casos se exige que los fondos permanezcan más de 90 días para poder generar intereses.

La institución financiera otorga una determinada tasa de interés sobre los fondos ahorrados. Los intereses son generalmente abonados a la cuenta en forma anual, después de ser calculados día a día en forma proporcional de acuerdo a la tasa acordada y al tipo de cuenta.

De esta manera, si una cuenta recibe intereses cada año, el banco simplemente verá lo que ha tenido ahorrado en esos 12 meses y se hará el cálculo respectivo.

Las instituciones financieras pueden subir la tasa de interés ofrecida en cualquier momento. Si, al contrario, decide bajarla, puede hacerlo el primer día de cada mes. Eso sí, deberá dar aviso, indicando la tasa, con una anticipación mínima de cinco días a la fecha de inicio del mes en que comenzará a regir.

Reajustes
La inversión en cuentas de ahorro no se desvaloriza por efecto de la inflación porque el capital se va reajustando de acuerdo a la variación de la UF.

Desde este año, los reajustes se abonan a la cuenta en forma anual. Antes, se hacía cada tres meses.

A diferencia de los intereses, los reajustes se pierden si el cliente se excede en el número de giros permitidos.

Cuentas de tipo giro incondicional
Éstas se caracterizan porque el cliente puede retirar la totalidad del dinero acumulado en cualquier momento; es decir, tiene como atributo principal su liquidez inmediata, pero por lo mismo es posible que pague una tasa de interés más baja.

Este tipo de cuentas permite hasta cuatro giros en el año, sin perder reajustabilidad.

Cuentas de tipo giro diferido
La liquidez de estas cuentas de ahorro es más restringida, ya que un retiro que supere las 30 UF debe ser comunicado al banco con, al menos, 30 días de anticipación. Esta restricción para los retiros es compensada con tasas de interés más altas. Además, permite uno o dos giros más que la alternativa incondicional sin perder rentabilidad.

Es habitual que este tipo de cuentas se asocie con tarjetas magnéticas que funcionan desde los cajeros automáticos. Desde estas máquinas no sólo se puede retirar dinero, sino también hacer depósitos.

Hay que tener en cuenta que cada vez que se sacan fondos de un cajero, se cuenta como giro.


Fuente: Bolsa de Comercio de Santiago; SVS; Banco Central; Guía Práctica "Mis Finanzas Personales".