martes, 10 de julio de 2012
Economía y Negocios
Para reducir el déficit público, el gobierno también anunció el alza de impuestos a productos específicos a 18%
Como una "contingencia" para hacer frente a situaciones apremiantes de los bancos hispanos. Así fue presentado el primer paquete de ayuda de 30 mil millones de euros (casi US$ 37 millones) que recibirá España y que tendrá a su disposición antes de que finalice este mes, luego de que los ministros de Finanzas de la Eurozona llegaran a un acuerdo en horas de la madrugada de hoy, dijo el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker.
A priori, se estima que esta ayuda iría en gran parte para recapitalizar Bankia y al resto de las entidades nacionalizadas. Eso sí, el monto total de la ayuda (que llegaría a los 100 millones de euros), sólo se determinará a fines de septiembre cuando se conozcan las necesidades exactas de todos los bancos a través de los resultados de la evaluación de las carteras crediticias encargada por el gobierno de Mariano Rajoy y a las pruebas de resistencia.
Juncker explicó que el vencimiento de los préstamos tendrá una media de 12,5 años y un máximo de 15 años. Y agregó que lo resuelto es un acuerdo político sobre el memorando de rescate a la banca, y que probablemente en la segunda mitad de este mes -tal vez el 20 de julio- se firmará el convenio formal.
Condiciones
Pero no todo es tan fácil, porque la decisión del Eurogrupo está supeditada a condiciones que impondrá a toda la banca del país ibérico.
Así es como se aplicará, por ejemplo, la "segregación de activos" en aquellos bancos que reciban ayuda pública en compañías específicas de gestión de activos, inmobiliarios en este caso. En otras palabras, se creará un "banco malo" para acumular activos tóxicos ligados al negocio inmobiliario que posea la banca.
Las condiciones también son para el sector. Tal como avanzó a su llegada a la reunión el ministro de Economía español, Luis de Guindos, todas las entidades tendrán que cumplir con el requisito de contar con el 9% de capital de máxima calidad, como hacen las más grandes.
El Estado tampoco se librará de nuevas obligaciones. "España tendrá que cumplir plenamente con sus compromisos bajo el procedimiento por déficit excesivo y las recomendaciones para corregir los desequilibrios macroeconómicos", aseguró el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Olli Rehn.
Es decir, que el gobierno español se verá obligado a subir el IVA, eliminar la deducción por vivienda, rebajar la imposición sobre el trabajo, entre otras.
A la salida de la reunión, el ministro De Guindos, se limitó a asegurar que España logró "dos muy buenos acuerdos" en el Eurogrupo.
Esto, porque además se acordó dar un año más, hasta 2014, para rebajar su déficit actual de 8,9% a 3%. Así, España no tendrá que rebajar este año su déficit hasta el 5,3 %, como se había previsto antes, sino que bastará con que se sitúe en 6,3%.
A ello se suma que ayer lunes España decidió subir los impuestos de algunos productos específicos hasta el 18%, para reducir su alto déficit público.
Sin definir una fecha para concretar la medida, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, dijo que seguirán las recomendaciones "bastante explícitas" del Consejo Europeo sobre un alza de la imposición indirecta. En tanto, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, dijo que priorizar las subidas de impuestos frente al recorte de gastos agrava la recesión y retrasa la recuperación económica.
