viernes, 03 de febrero de 2012
Silvana Celedón
Ministra del Sernam, Carolina Schmidt, analiza las cifras récord de participación laboral femenina al cierre de 2011 y anticipa los mecanismos que implementará el Ejecutivo para que ésta se eleve al 50%.
Actualmente, sólo las empresas con una dotación de 20 o más mujeres deben cubrir los gastos en sala cuna para los hijos menores a dos años. Sin embargo esta situación que a juicio del Gobierno representa una barrera de entrada al mercado laboral para las mujeres sería revertida.
En marzo, el Ejecutivo presentará un proyecto de ley que reformará la Ley de Sala Cuna, estableciendo que todas las empresas incurran en este gasto.
La ministra del Sernam, Carolina Schmidt, adelantó a "El Mercurio" que propondrá modificar el artículo 203 del Código del Trabajo, ampliando la obligación.
De esta forma, todas las firmas con más de 20 trabajadores deberán asumir tener un pago fijo destinado a sala cuna.
"La actual legislación genera un impuesto al trabajo de las mujeres y desincentivos a su contratación. Lo que queremos es que este cargo no sea 100% para los empleadores de mujeres y que la distribución sea más equitativa y emparejar la cancha", señala la ministra Schmidt.
La autoridad enfatiza que esta reforma beneficiará, principalmente, a los sectores más vulnerables, dado que en el caso de las mujeres que ganan, por ejemplo $200 mil, el costo de la sala cuna puede subir en 50% o más lo que gasta la empresa por contratar a esa mujer.
Schmidt afirma que esta medida -junto con los incentivos directos que establece el Ingreso Ético Familiar (IEF) a la incorporación de las mujeres al mercado laboral y los programas de emprendimiento femenino que lidera la cartera de Economía, además de otras iniciativas- permitirán que la tasa de participación femenina se eleve al 50%, meta fijada por el Presidente Sebastián Piñera al inicio de su administración.
La autoridad destaca las cifras registradas al cierre del año pasado, de acuerdo a los datos del INE del trimestre octubre-diciembre de 2011. Y es que la tasa de participación femenina subió del 42% que figuraba en la Casen 2009 a 48%.
El objetivo es que a fines de este año tal nivel suba a 49%.
La titular del Sernac afirma que es "clave" que el país siga en esta senda, ya que en América Latina la tasa promedio de participación femenina es de 53% y en las economías de la OCDE un 65%.
"Chile no alcanzará el nivel de país desarrollado mientras no aumente el número de mujeres que ingresan al mercado laboral", advierte.
Además, afirma que para superar la pobreza es fundamental que los hogares cuenten con un segundo ingreso.
Es por esa razón que hace hincapié en las cifras de los últimos meses. En el trimestre octubre-diciembre pasado, 3.030.020 mujeres figuraron con empleo en los datos del INE, en comparación a las 2.880.000 que se encontraban con trabajo a inicios de 2011.
De esta forma, las ocupadas respecto de la fuerza laboral femenina subieron a un 91,8%.
Expertos laborales plantean medidas para incentivar contratación
Una batería de medidas proponen los expertos consultados por "El Mercurio" para incentivar la contratación de mujeres.
De acuerdo a Juan Pablo Mesías, gerente de KPMG, es fundamental impulsar iniciativas pro flexibilidad de jornada. Por ejemplo, plantea implementar un sistema de jornadas reducidas y que eso se descuente en forma proporcional en el sueldo, y fomentar la creación de acuerdos internos entre trabajadoras y empresas para que las primeras compartan funciones y remuneraciones con pares. "De esta forma, se puede compatibilizar mejor el trabajo con las funciones del hogar", afirma y agrega que en lugar de que las empresas paguen la sala cuna, entreguen un bono a sus trabajadoras.
Por su parte, Andrea Bentancor, directora de Estudios de Comunidad Mujer, tiene reparos en materia de flexibilidad. A su juicio, estas prácticas "no parecen muy aplicables en gran masa en lo que refiere a asalariadas no calificadas". Por el contrario, explica, sí son relevantes para mujeres profesionales "talentosas", donde acuerdos en este sentido con empleadores podrían lograrse sobre la base de medición por logros. Bentacor pone el acento en otras acciones, como ratificar el Convenio 189 de la OIT, enviando un proyecto que equipare la jornada laboral de las trabajadoras de casas particulares y fomentar la cotización de independientes para mejorar la calidad del trabajo presente y la calidad de vida futura de estas mujeres.
A su vez, el socio de Ernst & Young, Mauricio Peñaloza, advierte que será "difícil" continuar rápidamente con una tendencia positiva en participación laboral femenina, más aún porque el desempleo femenino entre los 20 y 34 años es casi el doble en algunos casos que el de los hombres de la misma edad, advierte.
Es por eso que propone proteger los ingresos de la mujer madre y no el empleo de la mujer. "Medidas como el fuero las termina perjudicando, porque tienen barreras de entrada al mercado laboral", señala.
