jueves, 18 de febrero de 2010
Reuters/ EFE
El barril de crudo para entrega en marzo se cotizó en US$78 en Nueva York.
NUEVA YORK.- El petróleo cerró su tercera sesión consecutiva de ganancias con una fuerte alza que lo acerca a los US$80, apoyado por una caída en los inventarios de combustible para calefacción, pese al aumento general de los inventarios en Estados Unidos y al avance del dólar.
El crudo para entrega en marzo cerró en US$79,06 el barril, marcando un avance de US$1,73 respecto al cierre del miércoles, equivalente a un alza de 2,23%.
"La conclusión es que el reporte del departamento de Energía tiene pequeñas cuotas de información alcista, empezando con la caída mayor a la esperada en los inventarios de destilados", dijo Peter Beutel, presidente de Connecticut.
La Administración de Información de Energía (EIA) informó que los inventarios de crudo y gasolina subieron 3,1 y 1,7 millones de barriles, respectivamente, muy por encima de las estimaciones.
El incremento en las reservas de crudo coincidió con un mayor flujo de importaciones al mercado estadounidense, al situarse en una media de 8,5 millones de barriles diarios, 206.000 más que en la semana previa.
Por otro lado, los inventarios de destilados, incluyendo el combustible para calefacción, cayeron 2,9 millones de barriles la semana pasada, de acuerdo a los datos entregados por la EIA.
La cifra casi duplicó la caída de 1,5 millones que aguardaban los analistas.
"Hay también un factor estacional en el que la gente está mirando la próxima temporada de manejo y eso está ayudando a impulsar la gasolina", dijo Richard Ilczyszyn, estratega de mercados de Lind-Waldock en Chicago.
Los precios del crudo también se vieron fortalecidos hoy por la extensión de una huelga en las refinerías de Total, en Francia, en protesta por el potencial cierre permanente de una de las plantas.
El encarecimiento del crudo, por otro lado, coincidió con algunos datos favorables relativos a la actividad manufacturera en Estados Unidos y a las perspectivas de la economía en próximos meses, que suelen alentar expectativas de que aumentará la demanda de crudo y de combustibles.
