miércoles, 17 de febrero de 2010
Gabriela Villalobos
Economía y Negocios
Celfin, en representación de no más de cinco clientes de alto patrimonio, pagó $25.100 por cada papel, en una cerrada disputa con LarrainVial.
Ni la familia Navarro, ni un grupo de médicos, ni tampoco la isapre Banmédica.
Finalmente un grupo de no más de cinco inversionistas privados de alto patrimonio -representados por la corredora Celfin Capital- ganó ayer el remate del 9,7% de Clínica Las Condes (CLC), que poseía Sebastián Piñera a través de su sociedad de inversión Bancard.
Con la operación, LarrainVial concretó el mandato de venta que le entregó Piñera en abril del año pasado.
Fue esta misma corredora la que presentó la primera oferta . Pero su propuesta de $24.000 -valor mínimo al cual los títulos fueron colocados- fue contestada rápidamente por Celfin, que ofreció $24.010.
Así, en pocos minutos la disputa entre las corredoras elevó el precio de las acciones a $25.100, valor al cual finalmente Celfin se hizo de las acciones.
Celfin no sólo se adjudicó las 792.388 acciones de Bancard. Ante la sorpresa de los presentes, la corredora Jaime Larraín ofreció otros 9.300 títulos del establecimiento a un valor de $25.000. Celfin también adquirió este paquete.
Sin hacer declaraciones, los operadores de Celfin, LarrainVial y Jaime Larraín se retiraron de la rueda.
El que sí hizo declaraciones fue el socio de Celfin, Jorge Errázuriz. "Clínica Las Condes es una compañía de salud muy bien administrada (...) la industria de la salud en Chile tiene grandes perspectivas", fueron las palabras con las que Errazuriz hizo alusión al negocio que concretó ayer la corredora, según consignó Bloomberg.
Con esta operación se produce un reordenamiento entre los controladores de CLC.
Banmédica -ligada a Penta y al grupo Fernandez León-, CorpVida (Saieh) y la familia Navarro, además de Piñera, poseían un pacto de accionistas. Sin embargo, todos se abstuvieron de aumentar su participación en el establecimiento.
Banmédica -que posee el 10,24% de CLC- no habría elevado su posesión debido a que el objetivo al que apunta el holding de salud (C2-C3) es distinto al segmento ABC1 al que está dirigido CLC. Así, con la salida de Piñera, el grupo que mantenía el pacto redujo su participación total del 30,2% a 20,4%.
Entre los otros grandes accionistas se encuentran ahora María Cecilia Karlezi, que adquirió a fines de 2008 el 10% de la propiedad, y el grupo de inversionistas que reprenta Celfin, que sumando las acciones de Piñera y las 9.300 rematadas por Jaime Larraín, poseen ahora el 9,85%.
