Fondos Mutuos
Sólo 467 chilenos decidieron no esperar hasta los 65 años para jubilar y accedieron a una pensión de vejez anticipada en el primer trimestre de 2009. Según datos de la Superintendencia de Pensiones, esta cifra significa una caída de 59,5% si se compara con las jubilaciones adelantadas otorgadas en el primer trimestre de 2008.
Para Ronald Dempster, consultor de MiPrevisión, uno de los factores que arrastraron a las cifras fue la caída de los multifondos, que bajaron hasta 40% en el caso del tipo A (fondo más expuesto al mercado accionario). "Para pensionarse antes de los 65 años debes sacar una pensión que hoy es el 64% de la renta imponible promedio, porcentaje que irá en aumento hasta llegar al 70%", agrega. La baja de los fondos hizo más difícil llegar a esta meta.
"Muchos afiliados están conscientes de que no es conveniente para ellos jubilarse en un período de crisis", explica Roberto Fuentes, gerente de estudios de la Asociación de AFP.
Efectos de la reforma
Además, existen otros tres factores, introducidos por la reforma previsional, que explican el bajo número de pensiones anticipadas.
El primero es el bono por hijo nacido vivo, que obtendrán las mujeres que se pensionen a partir de julio de 2009. "Las mujeres deben estar esperando el primero de julio para pensionarse", dice Dempster.
A esto se suma la ampliación del Seguro de Invalidez y Sobrevivencia. "Que las mujeres generen pensión de viudez para sus cónyuges aumenta, aunque levemente, la exigencia de capital de las mujeres casadas para poder pensionarse", explica Fuentes.
La última razón, detalla Fuentes, radica en el cambio de escenario que produjo la reforma previsional. "El cálculo del Aporte Previsional Solidario (APS) castiga el hecho de haber adelantado su pensión. Lo anterior implica incentivos para no jubilar anticipadamente", dice Fuentes.
Suben pensiones de edad
Contrario a la tendencia de las jubilaciones anticipadas, el número de las pensiones otorgadas a las personas al cumplir 65 años (la edad legal de retiro) subió 26,9%. Las pensiones por sobrevivencia, en tanto, subieron 14,8%. El incremento en ambas se debe -según Fuentes- al aumento de las generaciones de afiliados en edad de pensión legal. En el alza de las jubilaciones por vejez también incidiría el acceso al APS y la Pensión Básica Solidaria, que estarían actuando como una motivación para los afiliados con bajos saldos.
En el caso de los beneficios entregados para las personas que sufren invalidez, el escenario es mixto. Mientras las de invalidez parcial cayeron 3,8%, las de invalidez total saltaron de 448 -en el primer trimestre de 2008- a 1.637 en el período enero-marzo de este año.
En este aumento de 222,3% también incidiría la reforma previsional, que introduce este tipo de pensiones, explica Fuentes. "Además, el APS del Estado, para los afiliados a las AFP, es para pensiones de vejez y también de invalidez. Los afiliados a las AFP no cubiertos por el seguro de invalidez y sobrevivencia que no se pensionaban, hoy lo están haciendo por el incentivo económico de la reforma", detalla Fuentes.