Después de un largo proceso, el grupo CGE -ligado a las familias Marín-Del Real, Pérez Cruz y el grupo Almería- ya tiene fecha tentativa para iniciar las obras de la hidroeléctrica de pasada Ñuble.
La iniciativa (136 MW y US$ 240 millones de inversión) ubicada en la Región del Biobío, aunque obtuvo la calificación ambiental en octubre de 2008, aún está a la espera de permisos de parte de la Dirección General de Aguas (DGA), los cuales irían por buen camino de obtención.
"Esperamos poder iniciar la construcción en el segundo semestre", afirmó el gerente general de la firma, Pablo Guarda, una vez concluida la junta de accionistas de la compañía y agregó que de concretarse esto podrían invertir US$ 50 millones durante 2009 en el proyecto.
Ñuble, no es la única hidroeléctrica en la que trabaja el grupo. La firma actualmente posee derechos de agua por un potencial de 300 MW. Guarda explicó que hasta el momento trabajan en los estudios de prefactibilidad y de ingeniería de dos proyectos, los que serían de menor tamaño que la central del Biobío.
Tras el prolongado proceso que enfrentaron con Ñuble, Guarda insistió en la necesidad de mejorar el proceso de tramitación ambiental.
"Si bien entre el año pasado y ahora hemos aprobado dos proyectos emblemáticos para el grupo (Ñuble y la planta propano aire de Peñalolén), nuestra opinión sobre los procesos ambientales no ha cambiado, seguimos pensando que la ley debe perfeccionarse y que las dos partes involucradas en el proceso, el encargado del proyecto y los que lo aprueban, tienen que cumplir con las condiciones que obliga la ley, es decir plazos", dijo.
El ejecutivo también señaló que están atentos a diversas oportunidades para seguir creciendo en generación, pero descartó que la compañía participe del remate de derechos de agua que hará Endesa en Aisén (río Ibáñez).
Para 2009 el grupo CGE destinó US$ 240 millones en inversiones, sin contar los recursos que se utilicen en la central Ñuble. El grueso de ese plan (US$ 150 millones) estará destinado al área eléctrica, donde participan en transmisión, distribución y generación. US$ 65 millones estarán detinados al ámbito gas (Gasco, Metrogas), dejando el resto para los negocios no regulados.