martes, 10 de febrero de 2009
Reuters
El plan anunciado por el secretario del Tesoro, Timothy Geithner, comenzará con US$500.000 millones para comprar activos tóxicos de los bancos, además de respaldar nuevos préstamos.
WASHINGTON.- El Tesoro de Estados Unidos anunció el martes un nuevo plan de rescate para eliminarUS$ 500.000 millones de los llamados activos tóxicos de los bancos y para respaldar préstamos por US$1 billón mediante la ampliación de un programa de la Reserva Federal.
El rebautizado "Plan de Estabilidad Financiera", anunciado por el secretario del Tesoro Timothy Geithner, dedicará US$50.000 millones en fondos de rescate para intentar detener las ejecuciones hipotecarias y suavizar el impacto de la profundización de la crisis inmobiliaria.
El Tesoro dijo que se creará un fondo de inversión público-privado, alimentado con dinero del Gobierno, para apalancar el capital privado, de manera que los activos tóxicos puedan ser absorbidos del sistema bancario. El objetivo es lograr que los bancos vuelvan a dar créditos.
Geithner reconoció el profundo escepticismo en torno a la justicia y eficiencia del programa de rescate bancario de US$700.000 millones aprobado por el Congreso en octubre.
El secretario dijo que los líderes de algunas instituciones financieras que han recibido ayuda oficial habían hecho mal uso de la buena fe necesaria para hacer que el rescate funcione.
"El espectáculo de grandes cantidades de dinero de los contribuyentes siendo entregadas a las mismas instituciones que ayudaron a causar la crisis, con una transparencia y supervisión limitadas, profundizó la desconfianza pública", afirmó Geithner.
La nueva estrategia del Gobierno destinará US$100.000 millones para cubrir riesgos que la Fed asuma al expandir un programa de US$200.000 millones para apuntalar los préstamos para los consumidores y las pequeñas empresas en un programa de US$1 billón, que también apoyará una serie de activos relacionados con hipotecas.
Tibia reacción
Los agentes de los mercados financieros no se mostraron demasiado impresionados por el anuncio. Las acciones y el dólar profundizaron sus pérdidas, mientras que los precios de los bonos del Tesoro tuvieron una reacción oscilante.
Los mercados parecían haber sido tomados por sorpresa por algunas de las medidas anunciadas.
"Hace apenas un día hablaban sobre un banco bueno y un banco malo. Ahora presentan algo completamente nuevo", dijo Robert Brusca, economista jefe de Fact and Opinion Economics en Nueva York. "No estoy seguro de que esto público/privado vaya a funcionar", agregó.
El presidente Barack Obama dijo en una conferencia de prensa el lunes por la noche que el balance de las hojas de los bancos era una prioridad y no descartó la posibilidad de que se necesite más dinero que los US$700.000 millones que el Congreso ha aprobado para completar la tarea.
"No sabremos si vamos a necesitar fondos adicionales o cuánto dinero extra requeriremos hasta que veamos cuánto éxito tengamos en restaurar el nivel de confianza de los mercados", dijo el presidente.
