jueves, 22 de enero de 2009
GUSTAVO ORELLANA Y MARIO ROJAS
Economía y Negocios
De los 2.000 trabajadores que BHP Billiton desvinculó, 340 son empleados propios y 1.660 son subcontratados.
En cuestión de meses, la gran minería pasó de ser el sector económico "estrella", con sueldos elevados y bonos millonarios, a uno que hoy enfrenta fuertes planes de desvinculación.
Con la medida dada a conocer ayer por parte de BHP Billiton de cursar dos mil despidos en Escondida, Spence y Cerro Colorado -los que, según la empresa, ya se realizaron-, ya suman unas 3.000 personas que han perdido su empleo en la gran minería chilena.
Esto, según cifras difundidas por dirigentes sindicales y sin contar los casi 5.000 que, según la Sonami han hecho lo propio en las faenas de menor tamaño.
El presidente de metales base de BHP Billiton, Diego Hernández, salió a calmar la situación. "Con esto volvemos al nivel de dotación del 2007. Estos cambios ya se realizaron. No esperamos nuevos cambios", dijo.
Situación que fue confirmada por la ministra del Trabajo, Claudia Serrano, quien afirmó que este anuncio no es una amenaza a futuro, sino que ha venido ocurriendo de una manera en que los trabajadores están informados y preservando sus derechos laborales. "Yo conversé con Diego Hernández", dijo la ministra, mientras explicaba que "no es que vengan 2 mil despidos en la minera Escondida", sino que esto ha sido un proceso gradual, que ha ido ocurriendo "en una buena parte porque hay proyectos que terminaron".
Hernández explicó además que esto no significa un cambio en el plan minero contemplado para el próximo año. "No vamos a bajar la producción", puntualizó el ejecutivo de la minera.
Lo anunciado por BHP Billiton se suma a la medida tomada por la casa matriz de Teck Cominco -Quebrada Blanca y Carmen de Andacollo- de reducir en 475 sus empleos en Chile, y del grupo Luksic, que prescindió de 70 trabajadores en Michilla y de 52 en El Tesoro.
Lo anterior, considerando sólo anuncios oficiales.
La baja en el precio del cobre encontró a la mayoría de las operaciones mineras con costos altos. En no pocas jornadas, la producción ha resultado más cara que el precio diario del metal, por lo que varias de ellas han producido con márgenes negativos. Por esto se han embarcado en planes de reducción de costos que incluyen, en no pocos casos, despidos.
"Lo que sucede en la gran minería yo lo calificaría más bien como un ajuste caracterizado por postergaciones de proyectos de inversión, donde los más afectados son contratistas y (...) personal de planta, aunque en mucho menor grado", explicó el director del Centro de Estudios del Cobre, Juan Carlos Guajardo.
Para el timonel del Centro de Minería de la UC, Gustavo Lagos, más anuncios están por venir. "Creo que está comenzando esto (...). La lógica dice que la selección de despidos se hace primero recortando las áreas menos vitales y, segundo, los trabajadores menos productivos. Este proceso de despidos va a forzar a sindicatos y a agrupaciones de profesionales a considerar reducción de salarios y reducción de la jornada para salvar el empleo", apuntó el académico.
Mineros dan ultimátum al Gobierno y alistan paro
"No vamos a esperar a que el verdugo baje el hacha". Así, Pedro Marín, presidente de la Federación Minera -que representa a unos 8 mil trabajadores de la gran minería-, le dio un ultimátum al Gobierno, y anunció la paralización de actividades de no existir soluciones inmediatas. El impacto que provocará en la zona la medida de BHP Billiton sería significativo, más aún con el alto nivel de integración que ha logrado la empresa en Antofagasta. Hoy, los dirigentes mineros, junto a representantes de otras asociaciones de trabajadores, se reunirán con el ministro de Minería, Santiago González.
Escondida reduce producción de cobre
Escondida registró un descenso de 17% en su producción durante 2008, logrando producir "sólo" 1,22 millón de toneladas de cobre en concentrados y cátodos, lejos de los casi 1,5 millón de 2007.
Además de la menor ley -que cayó de 1,72% en diciembre de 2007 a 1,04% en 2008- Escondida se vio afectada por la rotura de un molino SAG a mediados de 2008, lo que le hizo perder producción.
Escondida se vio obligada a postergar algunos planes de inversión tales como la construcción del proyecto de expansión llamado fase V y de la central termoeléctrica Kelar, en Mejillones.
