Alto número de familias inmigrantes pone presión al combate del déficit habitacional
miércoles, 27 de marzo de 2019
Dierk Gotschlich
Nacional
El Mercurio
Estimaciones del Ministerio de Vivienda cifran en alrededor de 250 mil las familias extranjeras que en el mediano plazo podrán optar a una vivienda definitiva o en arriendo a través de subsidios del Estado.
Noelia Ayala (49) es venezolana y llegó a Chile en 2017 junto a su esposo, hijo y madre. Como aún esperan su residencia definitiva, recibieron ayuda de un familiar que hizo los trámites para arrendar un departamento. Pero ella y su familia aspiran a tener una vivienda definitiva en el país mediante los subsidios que entrega el Estado. En Chile hay 1,2 millones de extranjeros y en la cartera consideran que, así como Ayala, buena parte de ellos requerirán ayuda estatal. Según la estimación del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), se necesitarían al menos 250 mil subsidios para población migrante y así evitar que estos caigan en situaciones como arriendos abusivos, hacinamiento e incluso en campamentos, cuyo número en los últimos años ha ido en aumento. "Siempre lo hemos dicho, bienvenida sea la migración, pero es un desafío para la política pública en el caso de vivienda. En el mediano plazo va a significar un esfuerzo importante que vamos a tener que realizar", afirma el ministro del Minvu, Cristián Monckeberg. En una reunión con representantes del País Vasco este lunes, el secretario de Estado admitió que "la migración va a golpear, calculamos, tanto como lo ha sido el impacto de un terremoto, por la necesidad de viviendas que familias van a requerir y que van a estar en Chile regularizadas e incorporadas". Sin ir más lejos, el plan de reconstrucción del terremoto del 27 de febrero de 2010 consideró poco más de 220 mil viviendas. Más exigidos Según los datos del último censo, de 2017, en Chile faltan 393 mil viviendas para dar una solución habitacional a familias chilenas y extranjeras que viven allegadas, hacinadas o en viviendas irrecuperables, incluidos los campamentos. Luego, la encuesta Casen de ese mismo año estimó que el déficit habitacional llegaba a 497 mil viviendas. Más allá de las diferencias -que el Gobierno dijo el año pasado que analizaría-, en ninguna de esas cifras se incluye el flujo migratorio recibido el año pasado, especialmente de venezolanos. Para paliar el déficit habitacional, el Estado dispone de una serie de ayudas para familias vulnerables y de clase media, además del subsidio de arriendo. Al año, se asignan cerca de 100 mil beneficios. Los extranjeros que quieran acceder a subsidios, tal como los chilenos, deben cumplir requisitos como un ahorro mínimo. Pero en su caso, además, deben contar cumplir con otros, como llevar un mínimo de cinco años viviendo en el país. Desde 2006, se han asignado más de 10 mil subsidios de vivienda para familias extranjeras que cumplen con esos requisitos. Pero como es en los últimos años cuando ha aumentado la cantidad de migrantes en el país, y deben cumplir el plazo de residencia, es en los próximos años cuando estos podrán postular a las ayudas. Felipe Arteaga, presidente de la Fundación Vivienda, plantea que como las familias migrantes no tienen redes de apoyo en el país, quedan más expuestas a la informalidad de la vivienda, por lo que "la migración le pone más presión a la política habitacional y le agrega otros desafíos". Experiencia foránea Una estrategia que está delineando el Minvu para enfrentar el mayor déficit habitacional es el "arriendo protegido", que está en un proyecto de ley en trámite y que busca concesionar terrenos fiscales para que privados construyan inmuebles donde parte se destine a subsidio de arriendo. Ese fue uno de los puntos que el secretario de Estado le planteó a la delegación del Departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda del Gobierno Vasco, cuando esta semana firmaron un convenio de colaboración en materia de vivienda, barrios, ciudad y territorio. El Gobierno Vasco es uno de los pioneros en mecanismos similares al "arriendo protegido", donde cada proyecto inmobiliario está obligado a otorgar el 20% del suelo para viviendas sociales. Javier Hurtado, gerente de Estudios de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), afirma que "mientras no tengas claridad de lo que va a hacer un migrante, si se va a quedar definitivamente en Chile o no", el subsidio de arriendo se ajusta mejor a la necesidad de los nuevos residentes. Coincide la investigadora del Centro de Políticas Públicas UC, Pía Mora, quien afirma que potenciar el subsidio de arriendo "no excluye la posterior adquisición de una vivienda definitiva, por lo que podría llamarse una etapa transitoria. Además, es positivo que haya una diversidad de alternativas". Ayudas Desde 2006 a la fecha, se han entregado poco más de 10 mil subsidios a familias extranjeras. "Es una decisión que tomaste en la puerta de entrada. Una vez que aceptaste a esa gente, se les tiene que tratar como uno más; y si requieren apoyo habitacional, hay que dárselos". ................................................................
JAVIER HURTADO
GERENTE DE ESTUDIOS DE LA CCHC
"Aún quedan discusiones por afrontar en esta materia, como si se les va a dar una solución a quienes no tienen su situación regularizada". ................................................................
PÍA MORA
INVESTIGADORA DEL CENTRO DE POLÍTICAS PÚBLICAS UC
"La provisión de la vivienda no está resuelta para la mayoría de los chilenos que lo requieren, entonces obvio que la llegada de más personas va a exacerbar esa política habitacional". ................................................................
FELIPE ARTEAGA
PRESIDENTE FUNDACIÓN VIVIENDA
