Dólar Obs: $ 974,97 | -1,02% IPSA -0,25%
Fondos Mutuos
UF: 37.207,48
IPC: 0,40%
Acorralado:

El plan maestro de China enciende las alarmas en Hong Kong

sábado, 23 de febrero de 2019


Internacional
El Mercurio

El proyecto de la Gran Área de la Bahía parece amenazar el estatus especial de la región.



No le falta ambición. El 18 de febrero, China presentó un plan maestro muy esperado para el Gran Área de la Bahía (GAB), una gigantesca asociación urbana que comprende las regiones administrativas especiales de Hong Kong y Macao, y nueve ciudades en la provincia sureña de Guangdong. La GAB contará con una población de 71 millones de personas y un área total de 56.000 km {+2} . Se convertirá, por mucha distancia, en el área de la bahía integrada más grande del mundo, superando a rivales como Tokio y San Francisco. El plan maestro pide a la GAB que juegue "el rol protagónico en el desarrollo económico del país".

Como la mayoría de las grandes ideas chinas, esta se atribuye al Presidente Xi Jinping. Tiene dos objetivos generales. El primero es alinear Hong Kong y Macao más estrechamente con el continente. Macao rara vez ha causado problemas a China; pero Hong Kong, una antigua colonia británica, ha visto un aumento en el sentimiento a favor de la independencia en los últimos años. De modo que el preámbulo del proyecto señala que la GAB permitirá a los "compatriotas" en Hong Kong y Macao "enorgullecerse de una patria fuerte y próspera".

Sin embargo, el plan se está promocionando en su segundo objetivo. El objetivo de la GAB es convertirse en un centro de innovación de "primera clase". La idea es aprovechar al máximo las fortalezas de las ciudades de la región para que cooperen, en lugar de competir entre sí. Hong Kong será el líder en servicios financieros y otros servicios profesionales. Shenzhen, hogar de gigantes tecnológicos como Tencent, una empresa de internet, se convertirá en "la capital de la creatividad con influencia global". Las ciudades comparativamente más pobres en la provincia de Guangdong continuarán enfocándose en la manufactura, produciendo todo, desde robots inteligentes hasta vehículos de nueva energía.

El proyecto también asigna a las ciudades nuevas industrias. Macao, por ejemplo, se supone que debe desarrollar una industria de la medicina tradicional china en un intento por diversificarse y alejarse del juego (en los casinos). La comunidad empresarial está empezando a entusiasmarse con la GAB. Una encuesta reciente realizada por KPMG, una consultora, a más de 600 ejecutivos en toda la región encontró que el 80% apoyaba el "desarrollo integrado".

El gobierno nacional de China ya ha estado tratando de unir más estrechamente a la región. En septiembre pasado, Hong Kong se conectó a la red de trenes bala de China continental. En octubre se abrió al tráfico un megapuente entre Hong Kong, Macao y Zhuhai, en Guangdong. El proyecto propone medidas adicionales de integración, como el reconocimiento mutuo de las cualificaciones profesionales.

Pero a diferencia de otros grupos de ciudades, la GAB abarca tres zonas aduaneras, tres sistemas legales y dos fronteras duras (Guangdong con Hong Kong y Macao). Su éxito dependerá de cuán libre sea el movimiento de personas, bienes y capital. Sin embargo, los habitantes de Hong Kong no estarán interesados en abrir fronteras con Guangdong.

Algunos tienen una preocupación más grande. La fortaleza de larga data de la ciudad, señala Alvin Yeung, el líder del Partido Cívico que es prodemocracia, es ser "no simplemente una ciudad china común". Hong Kong tiene permitido un alto grado de autonomía hasta 2047. Así, por ejemplo, las restricciones estadounidenses a las exportaciones de tecnología sensible a China no se han aplicado hasta ahora a Hong Kong. Sin embargo, Yeung teme que como la GAB unirá la ciudad cada vez más estrechamente al continente, puede terminar costándole a Hong Kong su estatus especial. En el peor de los casos, sería tratado por Estados Unidos y el resto del mundo como una ciudad china más.

 Imprimir Noticia  Enviar Noticia