"Para que salga Maduro falta un plan de transición o una declaración de los militares"
miércoles, 23 de enero de 2019
GASPAR RAMÍREZ
Internacional
El Mercurio
El diplomático, de visita en Chile, destaca el trabajo del Grupo de Lima y los nuevos pasos dados por la oposición.
Patrick Duddy cumplió funciones diplomáticas en Brasil, Panamá, Chile, Paraguay, Costa Rica; trabajó en el Departamento de Estado norteamericano, pero sigue siendo conocido como "el último embajador de Estados Unidos en Venezuela", cargo que ocupó entre 2007 y 2010, cuando ambos países rompieron relaciones. Duddy dejó el servicio diplomático y hoy dirige el Centro de Estudios Latinoamericanos en la Universidad de Duke, cargo que lo trajo esta semana a Santiago, en un viaje junto a estudiantes de MBA de ese centro de estudios. En un salón del hotel Ritz-Carlton, Duddy conversó con "El Mercurio" sobre las protestas, a la espera de la jornada de marchas de hoy, el papel de la comunidad internacional y los nuevos pasos de la oposición venezolana. -¿Cómo interpreta los movimientos de los últimos días? "Se espera que las manifestaciones de mañana (hoy) sean grandes por ambos lados. Es un momento claramente peligroso y difícil por ambos lados. La región, la Unión Europea (UE), EE.UU., han dicho que consideran ilegítimo al gobierno de Maduro, al mismo tiempo que consideran a la Asamblea Nacional (AN, Legislativo dominado por la oposición y presidido desde el 10 de enero por Juan Guaidó) como la única institución democráticamente electa. El consejero para seguridad nacional, John Bolton, enfatizó que EE.UU. reconoce la legitimidad del señor Guaidó y sus compañeros". -¿Cree que hay un plan, algo más organizado por parte de la oposición al juramentar a Guaidó en la AN, y reconocerlo como presidente legítimo, lo mismo que varios gobiernos? "No sé si se trate de un plan como tal, pero creo que algo ha cambiado. Por un lado, la economía ha continuado en caída con una inflación por encima de un millón por ciento. No sé si hemos visto esta incompetencia en cuanto al manejo de un gobierno. Me acuerdo bien de las épocas de hiperinflación en otros países, pero creo que nunca llegó a este nivel. El bolívar no tiene valor. Tampoco hemos visto antes una caída en producción petrolera tan dramática. La combinación hace la situación cada vez más difícil, y con este nivel de autoritarismo. Hasta ahora, la legitimidad del gobierno no era un cuestionamiento serio. Pero ahora sí". -¿Cuándo empezó este cuestionamiento? "Con esas elecciones de mayo del año pasado, que tantos países calificaron de fraude, yo mismo dije que era una coreografía. Desde entonces está la sensación de que el gobierno de Maduro corría el riesgo de ser deslegitimado. También desde que se formó el Grupo de Lima. Me parece que el cambio en el exterior también ha sido importante. Por lo menos tres millones se han ido del país y están refugiándose en Colombia, Ecuador, Perú, Brasil, Chile, etc. Ya anticipan que, sin cambios internos, habrá hasta dos millones más este año. Me parece que los países de la región están tratando de acoger generosamente a los venezolanos que se han visto forzados a huir. Pero a la vez, lo que este fenómeno está costando en el sentido más amplio en cuanto a esfuerzos, recursos, etc., en cuanto a esa fricción entre recién llegados y pueblos fronterizos, es muy serio. Todo esto ha contribuido a un cambio de ambiente en relación con ese choque entre la oposición y el gobierno venezolano". -¿O sea que la presión internacional y el trabajo del Grupo de Lima han sido efectivos? "Ha disminuido en cierto grado la sensación de que los venezolanos habían sido abandonados por sus hermanos de Latinoamérica, y sabemos por qué: en el hemisferio existen esas tradiciones de no intervención. Pero Venezuela ya está a punto de ser efectivamente un Estado fallido. Me parece que lo que el mundo ha aprendido de situaciones así es que los problemas de un Estado fallido no pueden ser contenidos por las fronteras, y eso es obvio que ya pasa con los refugiados". -¿Recuerda algún caso de Estado similar? "Un país con tantos recursos que no ha estado metido en una guerra, prácticamente no. Pero obviamente en África. Haití fracasó. No veo nada parecido a lo de Haití ahora en Venezuela, pero sí creo que el país está cerca de ser claramente un Estado fallido: escasez de medicina, comida; problemas con la distribución de agua; grupos irregulares armados; refugiados; inflación que básicamente ha matado la moneda nacional; un sistema hospitalario que no puede mantenerse al día con las demandas. Si eso no es fracaso, ¿qué es fracaso?". -¿Qué hace falta para que Maduro deje el poder? "Probablemente falta una salida para el gobierno, un plan de transición verdadera, o simplemente una declaración de los militares de que ya no apoyan al gobierno. Van a tener que solucionarlo, porque nadie quiere ver una repetición del Caracazo del 89, ni mucho menos una guerra civil. Entonces van a tener que buscar una salida al impasse . Y en ese contexto, me parece que la oposición va a tener que cuidarse de no caer en una trampa del gobierno".
