viernes, 19 de septiembre de 2008
María Teresa Solinas
Economía y Negocios Online, El Mercurio
Hoy se venden diez toneladas al año, equivalentes a unos US$ 50 millones, alcanzando crecimientos de hasta 30% durante el último año, impulsados principalmente por los tés premium.
Chile es el país con mayores ventas de té (la bebida más consumida en el mundo, después del agua) en Latinoamérica. El consumo per cápita es de 600 gramos, llegando a diez toneladas por año, más de US$ 50 millones.
Es por eso que las tendencias mundiales en esta industria no tardan en llegar, y a pesar de que el alto interés por el té en Chile no es algo nuevo, en los últimos cinco años se ha observado un importante cambio en el consumidor.
Si bien antes se trataba de un producto cuyo público objetivo eran los adultos y de estratos menos acomodados, hoy sus clientes son cada vez más jóvenes, profesionales y que prefieren los tés "premium", tal como sucede en Europa y Estados Unidos.
El té rejuvenece
Con este cambio de estrategia, a las empresas no les ha ido mal, ya que hoy es el segmento medio-alto el que muestra el mayor porcentaje en ventas.
En la industria señalan que el cambio en los consumidores se debe principalmente a una cuestión de moda y a un interés creciente por el "wellness" o estilo de vida saludable.
En eso están los chilenos. Actualmente, cada vez que en los hogares del país se compra té, se gasta en promedio $1.114; mientras que en el segmento C2 este gasto alcanza a los $1.336, destinando $15.717 en té durante un año, según el informe de Nielsen.
En este contexto, una de las apuestas más ambiciosas durante este año ha sido la de Lipton. Desde agosto, la marca representada en Chile por Unilever lanzó la campaña "Tea can do that", en la que se hace hincapié en los beneficios que ejerce el té -por su componente L-Teanina- sobre la mente.
En Unilever señalan que con esta campaña buscan conquistar un público nuevo que ya no sólo toma té a las cinco de la tarde, sino que opta por esta bebida por sus beneficios para la salud. Esto ha hecho que la edad de los consumidores de la marca haya bajado y que las ventas aumentaran en cerca de 20% en un mes.
Público exigente
El cambio en el público consumidor de té también se ha reflejado en los gustos cada vez más sofisticados. Así ha sucedido con Té Club y Té Supremo, que se reparten la mayor tajada de mercado en el país.
Según señalan en la firma, esto se refleja en un crecimiento en las ventas en torno al 18% en el último semestre, marcado principalmente por las ventas de té de especialidades, como el té verde y los tés con sabor.
Pero el furor de los chilenos por el té también se refleja en la proliferación de teterías.
"La tetería", ubicada en Providencia, fue uno de los sitios pioneros para el creciente interés de los chilenos por los tés "premium". En un año, sus ventas han crecido en torno al 30%, con un claro cambio en el tipo de consumidores.
Antes, sus clientes eran personas especializadas en té, pero ahora va gente que tras conocer los beneficios de este producto para la salud ha sofisticado sus gustos. En total, tienen cerca de 100 variedades, cuyos precios van desde los $2.250 hasta $14.000 los 50 gramos.
Algo similar a lo que observan en la tienda Zen Tea, que con menos de un mes instalada en el Portal La Dehesa, ven cómo los chilenos son cada vez más "especialistas" en té, algo que los motivó a instalarse.
Para ellos, lo que sucede con esta bebida es similar a lo que pasó hace algunos años con el vino, donde los consumidores pasaron de ser "funcionales" a ser "conscientes" de lo que están consumiendo.
El cambio en los consumidores se debe principalmente a una cuestión de moda y a un interés creciente por el "wellness" o estilo de vida saludable.
$1.114 en promedio se gasta en los hogares del país cada vez que se compra té.
El té helado también crece
El creciente gusto por el té ha aumentado el consumo de té helado. Tanto así, que en Lipton (una de las principales marcas del mercado, distribuida por PepsiCo) estiman un crecimiento superior a 30% para este año. En T-Company comparten las buenas proyecciones para el mercado y señalan que debido al creciente conocimiento de los consumidores acerca de los beneficios del té, sus apuestas también serán más sofisticadas, sumando a su línea de té negro y verde, un té blanco con miel.
