"La UDI no está radicalizada, está sin complejos"
domingo, 23 de diciembre de 2018
Bárbara Vial A.
Reportajes
El Mercurio
Reelegida al mando de la UDI, dice que su partido tiene una posibilidad real de elegir un presidente de Chile y admite que su campaña fue difícil: "Todo el establishment del partido estaba en la lista contraria".
"No quiero ser Margaret Thatcher, quiero ser Eva Perón porque lideró a los descamisados", afirma Jacqueline van Rysselberghe. La recién elegida presidenta de la UDI apoya sus manos en la mesa de la sala de conferencias del partido mientras marca un contraste entre la política que se hace en los salones y la de los trabajadores que marcharon por las calles de la Argentina de los 40. Es jueves, y mientras en La Moneda el Gobierno comunica la salida del general Hermes Soto de Carabineros, en la UDI ya están instalados un escenario y parlantes, mientras se pasea una banquetera que prepara la llegada de 300 personas para la celebración del triunfo de la senadora por la Región del Biobío el domingo pasado. La psiquiatra obtuvo el 52% de los votos frente al 48% de su competidor, el diputado Javier Macaya. Ya sentada en su oficina del segundo piso de la UDI, comenta que las flores rosadas que están en la mesa se las envió la alcaldesa de Maipú, Kathy Barriga. Se trata, quizás, de un simbolismo. Van Rysselbergue no contó con el apoyo de parte de los fundadores del partido ni de los llamados "coroneles", como se motejó por décadas a Pablo Longueira, Jovino Novoa, Andrés Chadwick y Juan Antonio Coloma. -¿Cuán complejo fue lograr este triunfo? -Ha sido súper satisfactorio, porque el enfrentarnos a una estructura fuerte era difícil. Me siento súper orgullosa, recompensada porque es un reconocimiento al trabajo que hicimos durante estos dos años. Si no hubiésemos hecho bien la pega, no habríamos podido ganar esta elección, porque nos enfrentamos a una estructura donde se apeló a los afectos, a la historia en común, a todo, a los diputados, a los expresidentes de partido. Acá todo el establishment del partido estaba en la lista contraria. -Compitió sin el apoyo de los "coroneles". ¿Ahora se siente una coronela? -(Ríe). -¿Se siente presidenta de las bases? -Me siento presidenta de toda la UDI. -Su triunfo fue con un margen más estrecho que en 2016, cuando compitió contra el diputado Jaime Bellolio. ¿Cómo lograr la unidad? -El nivel de participación que tuvo la UDI -cercano al 30%- demuestra que es un partido que está fuerte, vivo, que tiene garra. No tengo duda que una vez que pase la tensión que se genera en las elecciones, vamos a lograr construir esa unidad que no creo que sea tan difícil. Mal que mal tenemos ideas bastante parecidas, tenemos diferencias de estilo. -Pero hasta el momento no ha dado señales de unidad, como por ejemplo, incorporar a dos personas de la lista que perdió a su mesa directiva. -Han pasado pocos días. En principio, la idea era juntarnos con Javier Macaya el viernes, pero él no podía. Pero no voy a incluir a dos personas porque la directiva postula y tenemos llenos los cupos. Las señales de unidad no van por ahí. Son tratar de incorporar lo que ellos tenían pensado y que consideraban importante, poder incorporarlos en el proyecto político y potenciar un trabajo en conjunto. -¿Existen hoy dos almas en la UDI? -No creo que sean dos almas, porque el voto de Juan Antonio (Coloma) que es el que antes estaba conmigo y ahora está con Macaya, es más o menos el mismo electorado. Lo que pasa es que Juan Antonio apelaba a la historia del partido, al afecto, y eso es súper legítimo. -El diputado Jaime Bellolio dijo que está evaluando su salida del partido. ¿Hará algo para retenerlo? -He tratado. El rol de los coroneles -¿Hacia dónde conducirá la UDI en estos próximos dos años? -Esperamos tener una muy buena elección municipal. Ya le pedí al futuro secretario general, Jorge Fuentes, que apenas asumamos constituya una comisión de búsqueda de candidatos para tener tiempo de capacitarlos. -En las elecciones municipales pasadas, el partido fue uno de los más votados. Sin embargo, en las parlamentarias pasó a ser la segunda bancada, después de Renovación Nacional. -Pero en senadores tenemos la mayor bancada. Efectivamente, en diputados salimos segundos, pero debimos haber salido últimos. El escenario político que tuvimos que enfrentar fue súper complejo: una semana antes nos formalizaron a uno de nuestros dirigentes. Nos fue bien para el escenario que estábamos enfrentando. -¿Qué características debe tener esta nueva UDI? -Tiene que ser moderna, una UDI que se haga cargo de que el mundo cambió: la UDI nació hace 35 años como un proyecto político para enfrentar a la extrema izquierda. Tiene que ser un partido que mire hacia el futuro, que se haga cargo de los temas nuevos, pero que no desconozca sus orígenes. Quiero volver a ese espíritu popular que era el sello fijo de la UDI, y para eso vamos a crear una comisión permanente de clase media que se haga cargo y que busque aquellos temas que hoy día no están en la agenda pública. -¿Cambió la estructura del partido, que antes era liderada por los llamados "coroneles"? -Evidente. Es un partido que ya no puede ser manejado por las cuatro paredes del Congreso, en donde tienen que jugar un rol real las directivas comunales que acabamos de elegir, las regionales. El 52% dijo "queremos ser escuchados". Estoy súper orgullosa de poder representarlos. "Vamos a ir con un candidato a las primarias" -Entre José Antonio Kast y Joaquín Lavín, ¿dónde se ubica? -En Lavín. -¿Va a potenciar su candidatura presidencial? -Voy a potenciar la candidatura de la UDI. Vamos a ir con un candidato presidencial a las primarias de todas maneras. -Lavín se considera también UDI-Evópoli. -La UDI es un partido diverso. En mi región hay personas que vienen del mundo de la izquierda, Chadwick viene del mundo de la izquierda. -Lavín no votó por usted. -No, se equivocó. Nadie es perfecto. -¿Quiere ser la presidenta de la UDI que logre instalar al primer presidente de Chile de sus filas? -Hoy tenemos la posibilidad real de poder tener en el próximo gobierno un Presidente de la República de la UDI. Vamos a dejar hasta nuestra última gota de sudor trabajando para que a este gobierno le vaya bien y por eso es que la UDI ha demostrado una lealtad inquebrantable. Con una buena elección municipal, podemos lograr que haya un tercer gobierno de nuestro sector y que sea encabezado por un militante de nuestro partido. -¿Hay más cartas, aparte de Lavín? -Varias. Las cartas mejor evaluadas de nuestro sector son de la UDI. Evelyn Matthei, Andrés Chadwick, que hoy está medio magullado pero no tengo duda de que va a salir de esto porque tiene una habilidad política gigante y un alto nivel de conocimiento, que es un plataforma muy fuerte para poder proyectarse. Y tienes rostros cercanos a la UDI que marcan bien: Alfredo Moreno y Kathy Barriga. -Algunos analistas plantean que Kathy Barriga no está preparada para asumir ese rol. -Ella ha tenido una buena gestión municipal, que la ha subido en las encuestas. Lo que corresponde a su sector político es justamente reconocer eso. Es tan difícil poder destacar, que lo mínimo que uno puede hacer cuando alguien destaca es reconocerlo. -¿Usted también podría ser candidata? -No, soy presidenta de la UDI, voy a tener toda mi energía puesta aquí. -El Presidente señaló que José Antonio Kast no es el camino para Chile, que no le gustan los extremos. ¿Cuál es su opinión respecto del exUDI? -Es un político que ha tomado temas que son de nichos, no lo he visto todavía como un político que haya generado un movimiento político más integral. El factor Bolsonaro -¿Cree que el Gobierno se ha movido al centro o ha dejado atrás sus ideas? -Esto es como una cruz. La línea horizontal de la política es de izquierda-derecha, y en esa línea -y esto lo decía Jaime Guzmán-nos ubicamos a la derecha. Pero nos gusta la línea vertical, aquella que cruza el tejido social y que lo cruza desde el sentido común. Ese sentido común no tiene signo político. Ayudamos, y eso lo hicimos durante este tiempo, a tener una UDI sin complejos. Volvimos a recuperar la UDI popular. Hace poco tiempo habíamos pasado a ser la "Unión Demócrata Independiente". En un consejo general volvimos a lo que era la UDI e incluso recuperamos el adjetivo popular. -¿No cree, como plantean algunos dirigentes, que las posturas de la centroderecha se están radicalizando? -No me puedo hacer responsable de lo que hacen otros. La UDI no está radicalizada, está sin complejos. Alguien que no es capaz de reconocerse a sí mismo, no es capaz de proyectarse. -¿Qué le rescata al presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro? -No son realidades comparables. Lo que yo rescato de Bolsonaro es que le ganó a una izquierda que en Brasil era muy corrupta. La otra cosa que tiene Bolsonaro es que dice las cosas directamente. Soy psiquiatra y eso es sano. Uno no tiene por qué tratar de parecer lo que no es. Él mostró lo que era, y la gente de su país lo eligió, eso se llama democracia. -Entonces hay que hacer una política más directa. -Hay que decir lo que uno piensa. Si uno es de derecha, uno tiene que decir que es de derecha. Si uno está en contra del aborto, uno tiene que decir que está en contra del aborto. Si uno cree que no es conveniente que los niños se cambien de sexo, es legítimo decirlo sin tener que recibir una andanada de bullying . -¿El pinochetismo es parte de la derecha? -Sí, hay gente de derecha que es pinochetista, y otra que no porque vivió en el mundo de la izquierda. Crisis en Carabineros y voto de Chadwick -¿Qué hacer en Carabineros tras la forzada renuncia de Hermes Soto? -La situación en Carabineros era más profunda de lo que inicialmente se pensó. Probablemente con una nueva generación se puede hacer la reestructuración y la reforma de Carabineros que son necesarias para poder sacar a la institución de la crisis en que está. -¿Ha perdido credibilidad el ministro Chadwick tras los últimos episodios del caso Catrillanca? -No ha sido fácil todo este episodio. Es muy difícil haber podido actuar de una manera distinta cuando tienes enquistado dentro de Carabineros situaciones que son súper difíciles de entender. A mí nunca se me habría ocurrido pensar que Carabineros podría mentir de la forma en como lo hizo a su mando superior, que en este caso era Hermes Soto, al Gobierno, al ministro del Interior y al Presidente. -¿La UDI se siente representada por Chadwick? -Absolutamente, él es militante de la UDI, el votó en esta elección, espero que haya votado por mí. (Se ríe). -¿Votó por Javier Macaya? -No lo sé...
"(José Antonio Kast) es un político que ha tomado temas de nicho. No lo he visto todavía como un político que haya generado un movimiento más integral".
"(La UDI) es un partido que ya no puede ser manejado en las cuatro paredes del Congreso".
