La geometría sagrada de Gonzalo Sánchez
viernes, 16 de noviembre de 2018
Marilú Ortiz de Rozas
Cultura
El Mercurio
Con obras lumínicas de diversos formatos, el artista presenta en galería La Sala sus últimas investigaciones en torno a la cultura precolombina y las nuevas tecnologías.
Navegan en la mente creativa de Gonzalo Sánchez cientos de proyectos simultáneos, y "Geometría sagrada" se activó luego de una visita a San Pedro de Atacama, cuando vio la correspondencia entre la Cruz del Sur y la Chakana. "Esta última, conocida como 'la cruz andina' es un poderoso y antiguo símbolo, que data de unos cuatro mil años, y que resume la cosmogonía de las culturas precolombinas, en particular la incaica. Esto atañe a diversos países incluyendo el nuestro, pues esta figura aparece incluso en los textiles mapuche", precisa Gonzalo Sánchez. Este artista -que es además un conocido abogado- investigó durante meses esta espiritual figura, Chakana, que significa algo como "escalera hacia lo alto", en quechua, y que se encuentra también esculpida en piedra en diversos puntos del mundo incaico. "Es una cruz cuadrada, que cabe perfectamente dentro de un círculo, el que a su vez se va enmarcando en un cuadrado, y así sucesivamente, remitiéndonos a la geometría sagrada del universo", explica. Partiendo de esta figura, el artista investigó paralelamente sobre tinturas naturales, que usó para configurar la cruz y luego la modeló con los elementos que constituyen su lenguaje visual propio (luces led, espejos y efectos ópticos). Logra un resultado que alude metafóricamente a la Chakana, pero desde el arte contemporáneo. Presenta sus obras -una veintena de cajas lumínicas medianas y pequeñas, y una pieza de tamaño mayor- en galería La Sala, hasta el 15 de diciembre, creando una atmósfera donde la estética futurista se funde con el misterio y la cultura ancestral. "El artista tiene la libertad de reinventar o recrear cosas; en este caso, yo he querido reinterpretar la iconografía sagrada inca, pero con medios de última generación, y, lo más importante, porque toda mi obra contiene una intencionalidad conceptual, transmitiendo las inquietudes que nos hacen reflexionar en torno a la trascendencia del ser, al infinito", destaca Sánchez, quien pasó parte de su infancia en Ecuador, donde trabó un imperecedero contacto con pueblos originarios americanos. Finalmente, en conjunto con José Antonio Ruette, desarrolló una aplicación de realidad aumentada que permite a los asistentes interactuar con las obras desde sus celulares y observar variaciones en estas. Lo que, sumado a unos grabados y textos que profundizan en la historia de la Chakana, aportan una dimensión didáctica a esta atractiva muestra sobre la cosmogonía andina plasmada desde el arte lumínico.
