A Marte los boletos: reeditan olvidada historieta chilena de 1924
sábado, 10 de noviembre de 2018
IÑIGO DÍAZ
Cultura
El Mercurio
Del multifacético Andrés Magré F. , se trata de la primera obra de ciencia ficción dibujada en nuestro país. Pero la vida del autor es más aventurera que el viaje interplanetario.
Instalado en la terraza del edificio Ariztía de la capitalina calle Nueva York, que con diez plantas y una cúpula era el más alto de Chile desde 1921, un cohete espera al mediodía de ese día para despegar con rumbo al planeta Marte. Dentro lleva apenas dos tripulantes, el profesor Plúm y el capitán Flán, un científico y un explorador, la dupla perfecta para protagonizar la primera historia de ciencia ficción dibujada en Chile. "Viaje de la Tierra a Marte" es una temprana creación del multifacético Andrés Magré F. (1902-1990), que se publicó en la revista "Fausto" en 1924. Perdida en las capas del tiempo, la historieta fue recuperada, restaurada y reeditada por NautaColecciones ($10.000) en un cuidado libro de tapas duras, como una investigación acerca de la obra y más que nada acerca del autor, realizada por Moisés Hasson, el autor de "Cómic en Chile", "Pin-up" y "Sátira política en Chile". "Me tomó 25 años dar con Magré", dice, sin más, Hasson. "En 1988 supe por primera vez de su existencia cuando alguien que sabía que me encontraba realizando una investigación sobre ciencia ficción en la literatura chilena, me trajo unas fotocopias con tres episodios de esta historieta. Entonces comencé a buscarlo", rememora. Tuvo que llegar la era de internet para que Hasson pudiera rastrear con mayor exactitud al personaje. Entonces dio con un tal Magré en Buenos Aires: resultó ser el hijo. "Nos abrió la puerta de la biografía de su padre, Andrés Magré F., un personaje insólito y único. El viaje a Marte no es una aventura tan impresionante como su propia vida", dice el investigador. Hijo de padre francés y madre antofagastina, escritor de un metro 62, locutor radial, publicista intuitivo, fabricante de carros alegóricos, diseñador de vitrinas, pianista de cine mudo, jefe de dos familias a las que abandonó para continuar con sus viajes, Magré fue y vino por el mundo sin destino definido. Vivió en decenas de ciudades, sobre todo en Estados Unidos: "(Tengo) fondos algo escasos, porque todo mi capital eran el auto, la televisión, mi mujer y otros cachivaches", escribiría en sus memorias no publicadas, que dejó en una maleta. Sin estudios profesionales aunque escurridizo en el campo laboral más diverso, el de historietista fue uno de los tantos episodios de creatividad de Magré. "Es un pionero en la historieta publicada por capítulos, el famoso 'continuará...'. Realizó 15 episodios, de 12 cuadros, en las páginas centrales de la revista 'Fausto'", dice Hasson respecto de las tres partes del relato: el viaje por el espacio de Plúm y Flán, durmiendo en hamacas y en compañía de dos patos; la llegada y exploraciones en Marte y la aparición de dos pilluelos, los niños Chanchulín y Mameluco que se unen a los personajes centrales. El libro incluye un glosario de terminología chilenísima utilizada en las viñetas por Magré, en "Viaje de la Tierra a Marte", el primer y único cómic que realizó. Su vida iba a tener cientos de caminos y atajos más.
