La obesidad entre las chilenas es la más alta en Sudamérica
jueves, 08 de noviembre de 2018
C. González
Vida Ciencia Tecnología
El Mercurio
Tres de cada diez mujeres en el país son obesas. Tanto aquí como en todo el continente, el problema se suma a la desigualdad que afecta a la población femenina, según los expertos.
El 31% de las chilenas sobre 18 años son obesas, según un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO). Aunque se trata de un porcentaje inferior al 32,8% del informe de 2017, las cifras siguen ubicando a la población femenina del país a la cabeza de la obesidad en Sudamérica y entre las diez tasas más altas en todo el continente. Lo mismo ocurre con los menores de 5 años, en donde Chile tiene una de las tasas más altas de sobrepeso y obesidad infantil, que llega al 9,3%, superior al promedio regional (7,3%) y mundial (5,6%). Así lo destaca el "Panorama de la Seguridad Alimentaria y Nutricional en América Latina y el Caribe 2018", elaborado por FAO junto a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Unicef y el Programa Mundial de Alimentos (WFP), y que fue presentado ayer en una conferencia simultánea en Santiago, Panamá y Washington D.C. El documento -que cumple una década analizando la realidad y los desafíos nutricionales en América Latina y El Caribe-, revela que en la región siguen conviviendo dos problemas extremos, como la desnutrición (ver recuadro) y el exceso de peso. "Cada año sumamos 3,6 millones de obesos a esta región", advierte Julio Berdegué, representante regional de la FAO para América Latina y El Caribe. "La obesidad afecta a todos los países y no se salva nadie. Es una epidemia que está fuera de control y que, a través de las enfermedades crónicas no transmisibles, se ha vuelto la principal causa de muerte". Brecha de género En este panorama, el país ocupa un sitio preocupante. Junto a los altos índices de obesidad en mujeres y preescolares, los hombres chilenos no quedan atrás: el 24,9% de ellos son obesos, con lo que se sitúan en el segundo lugar dentro de la región, por detrás de Argentina (27,3%). "El cambio en los patrones alimentarios, con preferencia en productos con alto contenido en grasa, azúcar y sal, es una de las principales causas de las altas cifras de sobrepeso y obesidad que presenta la población chilena", dice Eve Crowley, representante de la FAO en Chile. Aquí, como en el resto del continente, las tasas de obesidad son mayores en mujeres, lo que da cuenta de una desigualdad de género asociada a múltiples factores, tanto biológicos como económicos y culturales, advierten los expertos. "Muchas mujeres tienen menos acceso a actividad física, o tienen empleos o rutinas en su vida diaria que las hacen ser más sedentarias, por ejemplo", dice Berdegué. Otro factor es el acceso a alimentos nutritivos: según el informe, el "27% de la población nacional no tiene el poder adquisitivo para comprar una canasta alimentaria saludable". Además, advierte que es uno de los 19 países de la región que no tienen suficientes frutas y verduras para cubrir las recomendaciones de consumo diario (400 gr) dadas por la OMS. "Paradojalmente, Chile es uno de los grandes productores de frutas y verduras, pero es tal el nivel de exportación que no queda en el país lo suficiente", dice Berdegué. El informe revela otro detalle: Chile es uno de los países con mayor gasto anual en alimentos consumidos fuera del hogar y en bebidas no alcohólicas, junto con Brasil, México y Colombia. Si bien medidas como el impuesto a las bebidas azucaradas o el etiquetado nutricional de los alimentos buscan revertir la obesidad, aún no es posible dimensionar su efecto. De todas formas, las evaluaciones preliminares son positivas, comenta Crowley: "Los consumidores están más informados y están identificando los alimentos más saludables". Según los expertos, estas medidas tomarán cuatro o cinco años antes de ver su impacto.
