Tiroteo en sinagoga deja al menos 11 muertos en EE.UU.
domingo, 28 de octubre de 2018
Agencias
Internacional
El Mercurio
El atacante, identificado como Robert Bowers, tenía un historial de publicaciones antisemitas en redes sociales y, según testigos, aseguró que necesitaba "matar judíos".
Menos de 24 horas después de que las autoridades arrestaran al sospechoso de enviar paquetes bomba a reconocidos críticos del Presidente Donald Trump, ayer un nuevo crimen volvió a conmocionar al país: un tiroteo en una sinagoga de Pittsburgh dejó al menos 11 muertos y 6 heridos. El sospechoso, un hombre identificado como Robert Bowers (46), ingresó a la sinagoga de la congregación Tree of Life (este de la ciudad) durante la mañana y abrió fuego contra los feligreses que se encontraban en una ceremonia de nombramiento de una guagua. Posteriormente, se enfrentó a tiros a los policías que llegaron al lugar, para luego rendirse y ser detenido por las autoridades. El ataque -que duró alrededor de una hora- dejó al menos 11 personas muertas, informó la expresidenta de Tree of Life y funcionaria del concejo municipal Lynette Lederman. Otras seis personas resultaron heridas, entre ellas cuatro policías, dijo Lederman. Wendell Hissrich, director de seguridad pública de Pittsburgh, describió el lugar de los hechos como "una escena de crimen horrible, una de las peores que he visto en mi vida". Según testigos, Bowers ingresó a la sinagoga gritando consignas antisemitas, y durante su enfrentamiento con las autoridades habría expresado su "necesidad" de "matar judíos". Posteriormente, los investigadores afirmaron que el sospechoso tenía un historial de comentarios en contra de la comunidad judía en redes sociales. En enero, Bowers se creó una cuenta en Gab -una red social que se describe a sí misma como alejada del "sesgo anticonservador" de plataformas como Facebook y Twitter, y que alberga a activistas de la extrema derecha y supremacistas blancos-, en la cual criticó y amenazó a la comunidad judía. Hace algunas semanas, el tirador publicó un enlace al sitio web de HIAS, una organización judía sin fines de lucro que estaba planeando una ceremonia para refugiados en distintos lugares del país, con el mensaje "Hola HIAS ¿Te gusta traer invasores hostiles para que anden entre nosotros?". Horas antes del ataque, Bowers posteó de nuevo contra la organización: "A HIAS le gusta atraer invasores para que maten a nuestra gente. No puedo quedarme sentado y ver cómo lo hacen. Prepárense. Voy a entrar". El Presidente Trump, quien durante los últimos días fue muy cuestionado por, según sus detractores, dividir a la población e incitar a actos violentos con su agresiva retórica, calificó el hecho en Twitter como "algo terrible" y "devastador". Horas más tarde, durante un acto público, el mandatario aseguró que "no hay tolerancia para el antisemitismo en EE.UU." y defendió la idea de que la presencia de un guardia armado en el templo habría servido para evitar la tragedia. El Primer Ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, en un video publicado en Twitter, declaró:"Estamos con la comunidad judía de Pittsburgh, estamos con el pueblo estadounidense ante esta horrenda brutalidad antisemita", dijo el gobernante. Según la AP, fiscales federales presentarán 29 cargos contra Bowers. Asimismo, el Departamento de Justicia informó que el atacante será procesado por crímenes antisemitas y "arriesgará la pena de muerte", declaró el fiscal general Jeff Sessions. El tiroteo, calificado por la organización judía Liga Antidifamación como "probablemente el ataque más mortífero contra la comunidad judía en la historia de Estados Unidos", hizo recordar otra serie de ataques sobre lugares de culto en el país, como la muerte de 6 personas tras un tiroteo en un templo Sij de Wisconsin, en 2012, el ataque que mató a nueve personas en una iglesia metodista de Carolina del Sur, en 2015, o, dos años después, el asesinato de 26 personas en una balacera al interior de una iglesia de Sutherland Springs, un pequeño pueblo de Texas. RESGUARDOS
Los departamentos de policía de Nueva York, Chicago y Los Angeles incrementaron ayer su presencia en sinagogas y otros lugares de culto tras el ataque.
