Más de $60 millones puede costar un caballo chileno

lunes, 22 de octubre de 2018
Arnaldo Guerra Martínez
Rodeo
El Mercurio

Registros de los remates dan pistas de cómo se ha valorizado el caballo de pura raza chilena. Morfología, línea de sangre y campaña realizada son, entre otros, los factores que influyen en su valor.

"E l precio más alto en que he vendido un caballo -prefiere reservar el nombre- fue uno que partió al extranjero por US$ 85 mil", dice Alberto Ponce, dueño de la empresa de remates que lleva su nombre, quien tiene una trayectoria de 32 años especializado en caballos chilenos. Ponce tiene un archivo con los precios de todos sus remates, en catálogos que abrió a Revista del Campo, donde en cada una de sus hojas está el precio al que se vendió cada ejemplar.

Un caballo chileno, especializado para el rodeo, se valoriza más cuando ya está en plena función. Por eso, la compra de un potrillo puede ser una apuesta, aun considerando los antecedentes genealógicos y demás factores que inciden en el precio. De ahí que, por ejemplo, un caballo corriendo en 1988 costó $ 3 millones 210 mil (en moneda de hoy) y otro este año salió por aproximadamente $16 millones 200 mil; es decir, 404,6% de diferencia.

"Los caballos no tienen valores estables. Estimo que se ha producido un alza enorme en los precios, debido a la alta demanda, pues han aumentado los nuevos corredores, lo que ha significado un crecimiento sustantivo y no así la crianza de calidad para esa demanda", señala Benjamín García Huidobro, especialista en caballos chilenos, jurado de exposiciones y director honorario de la Federación de Criadores. Acceder a los valores de los caballos no es tarea fácil, ya que muchos se realizan en forma directa; por eso, lo más a la mano para conocer cómo se ha movido el valor de estos ejemplares en las últimas tres décadas son los archivos de Alberto Ponce.

Ponce cree que no se han vendido caballos chilenos por más de 100 mil dólares, aunque es testigo de primera fuente de que a Ítalo Zunino Muratori, gran criador ya fallecido, le ofrecieron US$ 500.000 por el potro Malulo, cuando estaba en pleno apogeo, luego de ganar el Champion de Chile de 2006 y haber conseguido anteriormente tres premios al Mejor Ejemplar de la Raza en las exposiciones nacionales de caballos chilenos, más uno en Uruguay. Es decir, un potro con las dos b: bueno y bonito.

Alta demanda en Sudamérica

Tal como en los años 80, en el fútbol Patricio Yáñez y Carlos Caszely eran los más cotizados, en 1988 aparecen en los remates hijos de Estribillo, el potro más importante del siglo XX, como Escabullido, con un precio real a la fecha de $ 17 millones 980 mil, y Estandarte, que se convertiría en el potro estrella del criadero El Ideal, con $17 millones 338 mil.

En los años 90, cuando las estrellas del fútbol Marcelo Salas e Iván Zamorano partían al extranjero, también los caballos chilenos salían del país. En esta época se dio un gran auge, especialmente en Argentina y Brasil a la compra de chilenos para mejorar las características de los caballos criollos. El caballo de pura raza chilena, amparado por registros genealógicos más que centenarios, es reconocido por sus dotes de vaquero, especializado en el rodeo, con gran docilidad, suave boca y agilidad, y, sobre todo, por sus cualidades como mejorador de la raza, por lo que ha sido muy cotizado en el cono sur de América.

De ahí que cuando estuvo abierta la venta las cifras se dispararon y los valores locales también. Ahora se volvió a la normalidad porque las ventas están cerradas, ya que Chile fue suspendido como miembro de la Federación Internacional de Criadores de Caballos Criollos, tras negarse a cambiar el nombre de sus caballos por criollos y abrir sus registros genealógicos.

De ese auge queda la venta del potrillo Voy y Vuelvo, hijo del campeón Canteado, del criadero Agua de los Campos y Maquena, que partió a Brasil por el equivalente aproximado de $13 millones 535 mil. Lo mismo ocurrió con Flaite, del mismo criadero, hijo de Malulo, vendido a Argentina en $11 millones 311 mil.

Hoy, un caballo chileno puede costar entre $ 700 mil y más de $60 millones, dependiendo de factores como la morfología, edad, sangre, títulos conseguidos y el criadero del que provenga.

También marcan mucho los padres. Ahí son varios los que han estado de moda, como Estribillo, y algunos de sus hijos como Esquinazo, Estandarte, Escorpión y Canteado. Además, de Malulo, Estruendo y Plebiscito, entre otros.

Así como el criadero del que provienen. "Por ejemplo, Agua de los Campos y Maquena tuvo como reproductor a Esperando, hijo de Estribillo, y de él salieron Canteado y Pretal, dos veces campeones de Chile, y varios otros caballos que se han ido vendiendo bien", comenta Ponce. Otro caso, es el del criadero El Ideal, que tiene a Estandarte, también hijo de Estribillo.