"Cristina tiene poder para que no surja una alternativa peronista, pero no para ganar un balotaje"
lunes, 15 de octubre de 2018
Alberto Millán
Internacional
El Mercurio
A un año de las elecciones presidenciales de 2019, el columnista de La Nación afirma que Mauricio Macri necesita mantener su imagen de "antipolítico" en medio de las dificultades económicas y ante una oposición que puede "reconstruirse" gracias a la recesión.
Como una "crisis generalizada" define el consultor Carlos Pagni el escenario político de Argentina, marcado actualmente por la dura recesión económica que golpea a la administración de Mauricio Macri y por las investigaciones por corrupción contra su antecesora, la senadora opositora Cristina Fernández. Durante su visita a Santiago, en una actividad del Consejo Chileno para las Relaciones Internacionales, el columnista del diario La Nación comparó la situación de Argentina con la "polarización" exhibida en la primera vuelta presidencial de Brasil, un país que también ha sufrido una mala situación económica y varios casos de corrupción. En ese contexto, Pagni advierte que la recesión económica "puede afectar mucho a Macri", y determinará si las presidenciales de 2019 en Argentina se inclinarán hacia el oficialismo o hacia "un grupo tan complicado como el peronismo", donde el sector no kirchnerista aspira a desmarcarse de Cristina. -Actualmente, ¿qué sector político está bien o menos mal parado en Argentina? "En la Argentina hay una crisis con la política en general. El gobierno atraviesa una crisis económica muy importante. Las expectativas respecto de Macri se han deteriorado mucho, pero es cierto que la oposición peronista tiene todo un problema, porque Cristina Kirchner está muy impugnada, no solo moralmente, sino que hay un sector de la sociedad que identifica que los problemas económicos de Macri en gran medida son heredados". "Me parece que hay en esta crisis generalizada una pregunta que es: ¿hasta dónde un sector del peronismo que estuvo con el kirchnerismo, pero que se distancia, tiene la posibilidad de generar una alternativa al kirchnerismo y a Macri al mismo tiempo? Hasta ahora, ese sector se presenta como algo distinto. No sabemos si la gente lo identifica así, porque estuvieron muy vinculados al proceso de Cristina, porque fueron funcionarios, legisladores. Y tampoco sabemos si la Argentina sigue siendo una sociedad polarizada, que hace que el centro no tenga lugar, tal como está pasando en Brasil". -Se ha dicho que ha habido desajuste entre la política fiscal necesaria y el gradualismo. ¿Le ha faltado consistencia a Macri? "Macri tiene como dificultad: uno, un esquema de poder donde por primera vez un Presidente carece de mayoría en las dos cámaras; dos, pierde la primera vuelta, gana recién en la segunda vuelta; tres, un país que tiene una tradición económica de crisis, y una sociedad para la cual 'crisis' es una catástrofe. Y Macri no se encontró con una catástrofe, y no llegó a tener la gente el nivel de miedo necesario para que te transfiera el poder suficiente para que hagas las reformas que hay que hacer". "A esto se agrega que Macri, además, cometió errores importantes. En términos de política económica, me parece que sobrevaloró su capacidad para derrotar a la inflación. En segundo lugar, yo creo que tuvo una política equivocada en el Banco Central, y que eso determinó un problema de déficit de cuenta corriente (...). Y cuando el mercado vio que la economía tenía un déficit de cuenta corriente de más de cinco puntos del PIB, te castigó y ahí empezó la crisis. Y después, hay una forma de gestionar que se le cuestiona, que es que hay mucha dispersión de poder. Pero no sé si es un problema de convicción, porque a veces no se puede implementar, porque no tenés el vehículo". -¿Cómo ve al oficialismo y a la oposición para las elecciones presidenciales? "Hay una gran incógnita que es la recesión. ¿Cuánto se va a deteriorar el liderazgo de Macri? Imagínate que si el tema de las tarifas introdujo una crisis con el radicalismo (su socio de coalición), lo que puede pasar de acá a un mes y medio cuando la recesión se haga sentir en serio. Si surgirán dentro de la coalición gobernante candidaturas alternativas a la de Macri, es la primera pregunta. La otra es cuánta crisis se necesita para que un peronismo se reconstruya". "Hoy pareciera haber tres grupos en la Argentina: el gobierno, que debe tener 30% o 35% de adhesión o tolerancia; Cristina, que puede estar en un 30%, con un piso y un techo muy firmes y con una condición que hoy es clave, y es que Cristina tiene un gran caudal electoral en una zona que es central para el peronismo, en lo que nosotros llamamos el conurbano bonaerense. Sobre todo en la franja que rodea a la ciudad de Buenos Aires por el sur, con ciudades colindantes. Ahí se concentra la pobreza urbana. Ahí gana Cristina. Si yo soy peronista y no gano ahí, muy dificultosamente voy a llegar a la Presidencia. Ese es el problema que tienen los peronistas con Cristina, que tiene el poder suficiente como para que no surja una alternativa en el peronismo, pero un poder insuficiente todavía como para ganar una elección con balotaje. Entonces, el tercer grupo, que es el de los peronistas que dicen 'yo quiero ser una alternativa a Cristina o Macri', pero les cuesta surgir. Termina siendo muy a la brasileña. Brasil es el choque de dos negatividades. La mala imagen de Bolsonaro, para un sector de Brasil, y la del PT, para otro". -Además de este peronismo más moderado, ¿hay posibilidades de terceras fuerzas? "Yo lo veo muy difícil (...). Macri llegó al poder expresando que él es algo distinto de la política convencional. Que él no es un político. Y eso tiene que ver cada vez menos con su gestión, tiene que ver con el estilo, los niveles de corrupción". "Por eso rehúye de acuerdos con las fuerzas tradicionales. Porque dice, 'con dificultades en lo económico, lo único que me queda es seguirse ofreciendo como algo distinto'. Si eso sigue convenciendo y Macri sigue siendo percibido como alguien distinto -probablemente '(Jair) Bolsonaro', no por lo ideológico, sino por el rol antipolítico-, siga siendo él. El gran desafío de Macri es que la gente lo siga identificando como renovador". -¿Por qué se afirma que si Cristina va presa Macri queda peor? "No creo que haya una relación. Se supone que si Cristina entra presa, no compite, y ahí el peronismo se puede unificar más fácilmente y ahí a Macri se le complica. Primero no está dicho que Cristina vaya presa, yo creo que es difícil. Y en segundo lugar, cabe la posibilidad de que sí va presa -a diferencia del expresidente de Brasil Lula da Silva-, por prisión preventiva, y sea candidata igual. A lo mejor hasta adquiriría cierta mística". -¿Qué temas le conviene que se traten en esta elección a cada sector? Economía, corrupción... "El kirchnerismo lo que va a decir es este es un gobierno que fracasó económicamente y produjo un ajuste insensible desde el punto de vista social -que es lo que el gobierno trató de evitar que se diga-, que es un gobierno de derecha despiadado". "Y desde el lado de Macri, necesita decir que es un cambio cultural y que tiene otra concepción de la política".
