Dos libros invitan a enseñar juegos de tradición mapuche a niños preescolares
domingo, 14 de octubre de 2018
M. Cordano
Educación
El Mercurio
Los textos aportan ideas para fomentar el pensamiento lógico de los niños, relacionarlos con su entorno y hasta desarrollar mejor su equilibrio.
Para jugar newenkantun solo se necesita un coligüe resistente, de aproximadamente un metro, y dos niños sentados frente a frente, en el suelo, con las plantas de sus pies unidas. El palo se pone entre ambos, y cada uno lo toma de un extremo: a la cuenta de küla -tres, en mapuzungün- entre los dos deben intentar levantarse jalando el coligüe hacia el propio cuerpo. Quien primero se levanta, gana. El juego -que alude al desarrollo de la fortaleza física y espiritual- es una de las 12 actividades descritas en el libro "Aukantün - Juegos Mapuche para Educación Parvularia", de Ediciones de la Junta Nacional de Jardines Infantiles, Junji. Dedicado a niños de entre tres y cuatro años, está disponible para su descarga en la página web de la entidad (www.junji.gob.cl). Allí también se incluyen juegos como el trentrikawe -que invita a construir zancos con tronquitos-, el trewa ka marra -una representación de un perro persiguiendo a una liebre- o el elkawaktun , donde un adulto esconde un elemento que es conocido de antemano por todos. Los niños deben encontrarlo dándoles pistas generales como manpu le (derecha) o welepule (izquierda). En el libro, cada actividad incluye una ficha con los materiales necesarios, número de participantes e instrucciones, además de una pequeña reseña con la historia del juego. Por ejemplo, el de las escondidas nace cuando los más chicos acompañaban a sus papás en el cuidado de animales, o en otras actividades de campo abierto. También se explica que es una representación de situaciones reales, como cuando se perdía un animal y toda la comunidad mapuche se organizaba para participar en su búsqueda. Por último, cada una de las iniciativas mencionadas se acompaña de fotos donde se ve a distintos niños jugando, todos ellos viven en la Región de La Araucanía; las experiencias se tomaron de establecimientos de comunas como Purén, Freire y Lonquimay. "No es un libro teórico, buscamos que fuera fácil de leer. Tampoco quisimos que solo fuera mostrar el patrimonio mapuche; quisimos mostrar que esto es algo vivo. Se muestran prácticas vigentes y no necesariamente guardadas", explica Marcelo Mendoza, jefe de Ediciones de la Junji. Los buenos resultados de este primer título llevaron a que se preparara un segundo, que Mendoza adelanta, está en proceso de impresión. Se llama "Encuentros de Palin Pichikeche", y al igual que "Aukantün", estará disponible en línea, se distribuirá entre distintos centros de la Junji y se venderá en sus direcciones regionales. Este segundo libro lo preparó un equipo de la Región Metropolitana, donde anualmente se realizan encuentros en los que se juega al Palin. Para practicarlo se necesita un palo de madera y mucha agilidad. Desde 2011 se han hecho ocho de estos encuentros; el último fue a principios de octubre y participaron cerca de 500 párvulos. "Este tipo de libros son importantes, porque permiten revitalizar la lengua -cada texto viene con un glosario con la traducción de todas las palabras mapuche que aparecen-, así como juegos ancestrales que se dan en ciertos territorios, pero que muchos más niños pueden practicar", cree Verónica Maliqueo, educadora de lengua y cultura indígena de la Junji.
