sábado, 02 de agosto de 2008
LINA CASTAÑEDA
Economía y Negocios Online, El Mercurio
El ministro Osvaldo Andrade considera innecesaria una ley interpretativa. Dictámenes no son solución para empresarios.
El ministro de Hacienda, Andrés Velasco, y el del Trabajo, Osvaldo Andrade, mantienen su postura de resolver, a través de dictámenes de la Dirección del Trabajo, el mayor costo salarial por la extensión del pago de la semana corrida que involucra la ley que iguala el salario base con el salario mínimo.
No obstante, empresarios y expertos laborales insisten en que la única forma de corregir este efecto -no contemplado en el espíritu de la ley- es por la vía de una ley interpretativa o aclaratoria, a la cual se oponen los senadores PS Juan Pablo Letelier y Pedro Muñoz, integrantes de la Comisión de Trabajo.
Andrade dejó en claro que nunca ha sido el propósito del Gobierno generar a través de este proyecto o de una indicación una mejoría de remuneraciones, y tampoco un menoscabo.
"La Dirección del Trabajo tiene por mandato legal la posibilidad de interpretar normas legales a través de sus dictamenes, y es lo que va a hacer", puntualizó, al tiempo que consideró innecesaria una ley interpretativa. Pidió a los empresarios "que estén tranquilos, se ponen nerviosos con mucha facilidad", indicó.
Luis Nario, presidente de la Cámara Chilena de la Construcción, apunta a una ley aclaratoria, que, en opinión de abogados, es la manera más eficaz para evitar que se susciten problemas posteriores con la aplicación de la ley.
"Ésta es una situación extremadamente grave que no se ha sopesado en toda su extensión y que sólo se puede corregir adecuadamente a través de una ley que modifique o interprete el alcance de la norma sobre la semana corrida", dice el abogado del gremio, Augusto Bruna.
Ante consultas del público para interiorizarse de cómo los beneficia la ley, funcionarios de la DT están respondiendo que la normativa sólo opera para igualar el sueldo base con el salario mínimo. Argumento que es refutado por el presidente de la Asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas (Asimet), Arturo Lyon.
Efectos en empresas
Un tema es igualar el sueldo base con el mínimo, pero la parte variable de la remuneración, que está muy sobre el mínimo, queda ahora afecta al pago del séptimo día, y hecho el estudio en el sector, en varias empresas el impacto de este aumento salarial es de entre 15 y 20%. Según el dirigente, con el dictamen puede ser una solución entre las partes, pero si se produce un conflicto, el juez debe atenerse a la ley, que es bastante clara respecto del pago del séptimo día en salarios con componente fijo y variable.
Nario apela a que en esta oportunidad exista la misma reacción del año 2001, cuando en sólo días se resolvió la mala inscripción de candidatos DC en las elecciones parlamentarias mediante la veloz aprobación de una ley.
El senador Letelier argumenta que a muchos trabajadores, especialmente del sector retail, se les calculaba el pago del séptimo día en función del sueldo base, y no del valor promedio de día trabajado, que incluye remuneración fija y variable. "En ningún momento fue intención de la ley aumentar el universo de personas a quienes se les paga el séptimo día, sino que se les pague lo que corresponde", indicó.
El pago del séptimo día que origina el problema
"Igual derecho tendrá el trabajador remunerado por sueldo mensual y con remuneraciones variables, tales como comisiones o tratos; pero en este caso, el promedio se calculará sólo en relación a la parte variable de sus remuneraciones". Ésta es la indicación (referida a la semana corrida) que presentó en abril el ministro Andrade al proyecto de ley que iguala el sueldo base con el salario mínimo. La ley entró en vigencia el 21 julio, y cuatro días después la Dirección del Trabajo emitió un dictamen que da un plazo de seis meses para adecuarse a la normativa.
El presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Alfredo Ovalle, expuso al ministro Velasco los efectos de mejorías salariales que implican un alto costo para las empresas, lo que derivó en la decisión de emitir nuevos dictámenes, tema que han reiterado los titulares del Trabajo y Hacienda.
Hasta el 21 de julio, la semana corrida o el pago del día domingo, que data desde 1948, era un beneficio para los trabajadores remunerados por día, cuyo universo era cercano a los 300 mil, según cálculos de gremios empresariales. Lo que hizo la ley fue extenderlo a los trabajadores con una remuneración mensual mixta (componente fijo y variable), con lo cual el universo se ampliaría a 2 millones de trabajadores, especialmente en rubros como el comercio, la construcción, la industria, y en parte de la agricultura. De acuerdo a cálculos privados, si un trabajador tiene un sueldo base de $400.000 y un sueldo variable de $400.000, si su jornada es de cinco días se debe aumentar en 20% la parte variable; y si es de seis días, en un 16%.
