jueves, 31 de julio de 2008
Economía y Negocios, El Mercurio
Expectativas de inflación llevaron al índice a su menor nivel desde 2001.
La confianza de los consumidores continúa en picada al descender 10,4 puntos porcentuales en junio, llegando a 88,6 puntos, el peor nivel desde que en 2001 el Departamento de Economía de la Universidad de Chile comenzara a levantar la Encuesta de Percepción y Expectativas sobre la Situación Económica en el Gran Santiago.
Entre los principales problemas que enfrenta el país, en opinión de los capitalinos, el Transantiago dejó de ocupar los primeros lugares desplazado por la seguridad ciudadana, con mayor énfasis en los sectores de más altos ingresos.
El segundo lugar en el ranking, la inflación o el alza del costo de la vida aparece como un nuevo fenómeno de preocupación con un promedio de 15,8%, que es transversal en todos los tramos de ingresos.
El transporte público ahora ocupa el cuarto lugar con un 10% de las preferencias.
En general, la situación esperada y la situación del país experimentan una fuerte caída en la percepción de los encuestados, reflejando la situación internacional que advierten organismos multilaterales, pero también cae la percepción de los capitalinos acerca del país y de la familia, pese a que los datos de la encuesta de empleo revelan un leve mejoramiento en los ingresos de los ciudadanos consultados. Aunque las intenciones de compra de vivienda bajan levemente, el deseo de adquirir bienes durables en un período de doce meses también se reduce fuertemente.
David Bravo, director del Centro de Microdatos, y Oscar Landerretche, académico del Departamento de Economía, plantean su preocupación por el empeoramiento de las expectativas. Su temor es que esto se empiece a reflejar en el comportamiento del consumo y de la inversión de pequeños empresarios generando finalmente efectos en la actividad económica y en el empleo.
"Es una señal de alerta al Banco Central para el cual es bien importante que exista confianza en que ellos van a ser capaces de establecer a futuro rangos de inflación aceptables. Y el Ejecutivo debería preocuparse de que esta depresión en las intenciones de compra pueda reflejarse en comportamientos reales", dice Landerretche.
Los académicos reconocen que el resultado de la encuesta está inserto en un panorama general de pesimismo en el mundo, del cual Chile no se puede sustraer, pero sí podría sustraerse el tema de la conducción de la política macroeconómica de las presiones y ansiedades que generan los períodos electorales.
