miércoles, 30 de julio de 2008
Reuters
85 economistas encuestados entre el 28 y el 30 de julio dijeron que el BCE dejaría las tasas en 4,25% cuando se reúna el 7 de agosto, luego de elevarlas en julio por primera vez en un año para combatir la inflación récord.
LONDRES.- El Banco Central Europeo mantendrá sin cambios las tasas de interés muy entrado el 2009 mientras la inflación registra niveles conflictivos, en medio de señales de que el crecimiento económico podría haberse estancado, dijeron economistas encuestados por Reuters.
La tarea del BCE de garantizar la estabilidad de precios será puesta a su prueba mas rigurosa en los meses venideros, a medida que la inflación sube a su nivel máximo histórico, mientras que nuevos datos de julio demostraron el miércoles que la confianza económica de la zona del euro se encuentra en su menor nivel en de cinco años.
Los 85 economistas encuestados entre el 28 y el 30 de julio dijeron que el BCE dejaría las tasas en 4,25% cuando se reúna el 7 de agosto, luego de elevarlas en julio por primera vez en un año para combatir la inflación récord.
La mayoría dijo que el BCE se vería forzado a dejar las tasas tal como están por mucho más tiempo. Pero algunos bancos importantes están apuntando a dar continuidad a alza de la tasa de julio para cuando finalice el año, a medida que la inflación se acelera.
El sondeo mostró a las tasas estables hasta el segundo trimestre del próximo año, en cuyo momento se espera que la inflación haya atenuado considerablemente, dejando espacio para que el banco se concentre más en apoyar el crecimiento y recortar las tasas.
Esto está en línea con una encuesta realizada a comienzos de julio.
"El BCE se estará preocupado de que la inflación pudiera estar en un 4,1% cuando se reúna y eso ensombrecerá las discusiones. Pero al mismo tiempo ha habido un drástico deterioro de la confianza empresarial el mes pasado", dijo Julian Callow, economista jefe europeo de Barclays.
El sondeo mostró una mediana de 20% de probabilidad de un alza de la tasa para finales de año, con una probabilidad media de un 27%, casi en línea con lo que apuestan los mercados financieros.
Diecisiete de los 85 economistas señalaron que las tasas subirían a un 4,5% o incluso más para finales de este año, con sólo tres pronosticando que el BCE revertiría su alza de julio para ese momento.
La inflación para julio se aceleraría a un nuevo máximo de 4,1%, o incluso más, cuando el jueves se den a conocer los datos de la inflación, el doble del techo del 2% del BCE.
De continuar bajando el precio del crudo de su record de más de US$147 por barril registrado a mediados de julio, entonces la inflación podría bajar más rápidamente en el segundo semestre y aliviar los temores de que el BCE pudiera subirlas nuevamente. El crudo cotizó el miércoles a alrededor de US$122 por barril, un descenso de US$25 en apenas unas cuantas semanas.
