Siempre hay uno cerca de usted: perros que protagonizan historias
jueves, 20 de septiembre de 2018
IÑIGO DÍAZ
Cultura
El Mercurio
Lupita, Adela, Simón, Patas, Apolo, Fabio: multitud de canes se toman las páginas de una serie de relatos para leer en familia.
Tienen nombres de genuinos perros chilenos: Patas es uno, Lupita es otra, Apolo es otro más. Las vidas de los tres se entrecruzan en el momento y el lugar preciso un día cualquiera en el barrio de la Vega Central y sus merodeos, porque si hay personajes que habitan esos sectores, son los perros de la ciudad. El cuento está narrado por J Banana, el pseudónimo de la doctora en Literatura y académica de la Universidad de Chile Juana Lorena Campos, en el libro "Historias de perros, libros y amistad" (Calambur Ideas, $12.500). Ilustrado por Sofía Venzano, más que un libro infantil de una autora, es el resultado de una larga investigación que Campos lideró desde la Facultad de Filosofía y Humanidades. "En 2010 comenzamos a realizar lecturas de cuentos con niños de escuelas municipales. Los estudiantes de distintas licenciaturas humanistas salían a terreno para trabajar en ese proyecto que buscaba incentivar la lectura y el disfrute literario", recuerda J Banana. "Tiempo después creamos una serie de cuentos por capítulos que leíamos cada semana. Vimos que los perros eran personajes muy principales en sus vidas. Los incluimos en los textos. De ahí nació este libro, que tiene mucho de creación colectiva", agrega. Patas es un perro abandonado al que locatarios de la Vega rescatan y adoptan. Conoce y se hechiza con Lupita, perrita que también fue cuidada tras un atropello y que además sabe leer. La llaman Lupita Mistral. Y Astro es un patiperro en el más amplio sentido de la palabra, puesto que deja las patas en sus recorridos por esos barrios junto con su dueño, don Ruperto, un coleccionista de palabras. Él incentiva a los tres perros a conocer vocabularios diversos y leer. "La amistad es la clave de este cuento", señala la autora, en un enfoque pedagógico. El mismo sentido educativo tiene el libro "Adela y los calcetines desaparecidos" (Amanuta, $14.000), claro que aquí su autora, Florencia Herrera, pone foco en un tema puntual que no siempre está a la vista en la sociedad. Es, justamente, la discapacidad visual. "Una ciudad puede ser hostil o inclusiva para las personas con discapacidad visual", escribe la autora, y luego da consejos para relacionarse con las personas que tienen ceguera o poca visión: nunca asumir que necesitan ayuda, nunca tocarlas sin avisar antes, no utilizar indicaciones gestuales, sino palabras claras. Con dibujos de Bernardita Ojeda, la perra Adela protagoniza la historia. Un día extravía sus calcetines rojos regalones. Luego le ocurren todo tipo de incordios porque ella -que aún no lo sabe- está perdiendo la visión. El cuento incentiva los mecanismos sociales de inclusión y promueve la presencia de los otros cuatro sentidos básicos como herramientas para tener una vida mejor. Un día en la vida La portada de "Ni guau ni miau" (Nube Ocho, $13.800), de la española Blanca Lacasa, es descriptiva: un perro que no es del todo perro, porque se comporta un poco como gato. "Fabio no ladra. Fabio no va a buscar el palito. Fabio no mueve la colita. Fabio no se parece a otros perros...", escribe Lacasa en un divertido y también reflexivo cuento que intenta poner atención en la diversidad social, la aceptación de la diferencia y el respeto a la libertad individual. En tanto, una de las novedades que Ekaré Sur tiene para este semestre es el libro de otro patiperro chilenero, con textos del poeta Rafael Rubio y acuarelas de Gabriela Lyon. "Un día soleado" ($13.000) es una historia narrada en coplas y cuecas sobre las aventuras de Simón, un perro del río Mapocho que vive en una casa de cartón. Un día sale a pasear y conoce a la niña Rafaela en el Parque Forestal. Mientras juegan, un perro ladrón irrumpe y desencadena los episodios del relato que tiene como telón de fondo el mismo parque y el río, además del Museo de Bellas Artes y el Mercado Central.
