15 figuras de Ciudadanos renuncian con fuertes críticas a Velasco: "El partido se convirtió en una secta"
sábado, 01 de septiembre de 2018
Paula Valenzuela
Nacional
El Mercurio
"Tarde nos dimos cuenta de que Andrés Velasco no es confiable. Mientras le fuimos útiles a su proyecto político personal, cuando lo apoyamos en el caso Penta, cuando le destinamos tiempo y recursos, no tenía problema, pero el día que pensamos distinto, fuimos traidores y fachos", dice Jorge Errázuriz, otro que dimitió.
Referentes de Ciudadanos concretaron ayer su renuncia ante el Servicio Electoral (Servel) al partido Ciudadanos Somos Todos -fundado, entre otros, por el ex ministro de Hacienda y ex precandidato presidencial Andrés Velasco- luego de vivir intensas dos semanas de críticas públicas y cruzadas después de las elecciones internas de esa colectividad, que se realizaron el 17 y 18 de agosto. En esa contienda se enfrentaron Juan José Santa Cruz e Ignacia Gómez -de la lista de Velasco- y que terminó con acusaciones de "fraude" por parte de la abogada. Los resultados hasta hoy no se conocen, pues Velasco y su equipo se han negado a abrir la urna hasta que no se eliminen los supuestos sufragios fraudulentos. Y la última propuesta la hizo la nómina de Santa Cruz -junto a la tercera lista, de Claudio Quiroz-, que pedía a las personas de los supuestos votos fraudulentos que volvieran a emitir su opción, la que no tuvo acogida. Con eso, estas quince figuras -Sylvia Eyzaguirre, Ricardo Escobar, Eugenio Evans, Paola Assael, Sebastián Sichel, Juan Ignacio Correa, Patricio Artigoitía, Alejandro Jadresic, Rodrigo Moreno, Viviana Pérez, Jaime Briceño, Esteban Jadresic, Patricio Arrau y Claudia Chávez-, además de Santa Cruz, dieron todo por terminado. Y con duras críticas, sobre todo a Andrés Velasco. En todo caso, algunos de ellos evitaron referirse al ex candidato a senador directamente, como Eyzaguirre, Escobar y Evans. "Ciudadanos se convirtió en una secta, hay un líder que intenta distorsionar la realidad y busca tener a sus seguidores a todos como corderitos", critica Arrau. Artigoitía agrega: "Ciudadanos está capturado y destruido. Hoy es un instrumento de Andrés Velasco, y como iba a perder, bloqueó la elección. Esto está parecido a la CUT. El que pierde acusa de fraude y sigue siendo presidente". Santa Cruz, por su parte, manifiesta: "Nos vamos porque fundamos este partido para aportar a la política mejorando la democracia a través de un proyecto colectivo y no personalista. (...) A estas alturas no estoy de catón moral de nadie, prefiero que terceros sean los encargados de hacerlo. Quienes hacen de la política una prédica moral, generalmente, son los que se les cae la prédica en la cara". A estas renuncias se sumaron 80 militantes, número que podría ascender a 200. Además, Rafael Guilisasti -empresario, del grupo fundador, pero sin militancia- también lamenta el quiebre: "Encuentro lamentable el desenlace (...) Una oportunidad perdida, el centro no sale de su atomización". El quiebre Las diferencias profundas comenzaron en diciembre, cuando el grupo liderado por Santa Cruz decidió apoyar en segunda vuelta presidencial a Sebastián Piñera. "La política es para sumar, no apoyamos el purismo", decían por esos días. Esto fue rechazado por Velasco. "Se lo tomó como algo personal. Se enfureció, nunca más nos habló", recuerdan. "Tarde nos dimos cuenta de que Andrés Velasco no es confiable. Mientras le fuimos útiles a su proyecto político personal, cuando lo apoyamos en el caso Penta, cuando le destinamos tiempo y recursos, no tenía problema, pero el día que pensamos distinto -cuando apoyamos a Sebastián Piñera-, fuimos traidores, fachos, momios y cortó incluso la amistad de años con todos los adherentes a la lista liderada por Santa Cruz", dice Jorge Errázuriz. Sin embargo, dicen en este grupo, las diferencias comenzaron antes. Sus amigos le aconsejaron hacer alianzas con otros partidos para la elección parlamentaria, pero Velasco se obsesionó con el Maule, según cuenta Correa. "No puedo seguir conviviendo en un partido donde su líder se 'izquierdizó' tras su derrota en el Maule", añade. "Entré a participar en un proyecto político colectivo y eso dejó de existir, porque hemos tenido un conflicto en estas elecciones, y en vez de dejar que nuestras instituciones funcionen, ha habido un grupo que no ha respetado la democracia", expresa, por su parte, la investigadora del Centro de Estudios Públicos (CEP) Eyzaguirre. Sobre el futuro del grupo, se declaran en reflexión. Otros, "desilusionados". Pero ya han hablado de formar una especie de federación "de centro, liberal y laica" (ver tribuna). También ven con buenos ojos Comunidad en Movimiento -de Soledad Alvear- y Progresismo con Progreso.
