Dólar Obs: $ 914,99 | -0,27% IPSA -0,25%
Fondos Mutuos
UF: 39.681,92
IPC: 0,30%
Chilenos instalan casa de matrimonios en su viña de Nueva York

domingo, 06 de julio de 2008

Carolina Gutiérrez U.
Economía y Negocios, El Mercurio

Pablo Castro junto a sus socios en el Holding Pacal están remodelando la viña norteamericana más antigua para salones de eventos.

La bodega de Brotherhood es monumento nacional en Estados Unidos y es visitada por 100.000 personas al año. Hoy está siendo remodelada por tres chilenos para ser convertida en un salón de eventos a sólo una hora de Manhattan.

Este importante edificio neoyorquino, junto a sus viñas, fue adquirido hace tres años por los empresarios Pablo Castro, Nelson Murúa y Carlos Silva, que además son los dueños del Grupo Inmobiliario Pacal, una de las cinco empresas más importantes de ese rubro en los segmentos C2 y C3. Además, los tres son propietarios de la viña chilena Casas Patronales y plantaciones de manzanas en la VII Región.

"Las casas de matrimonios están copadas hasta 2010 en Nueva York", explica Pablo Castro, socio mayoritario del grupo, cuyo buen ojo para los negocios les permitió detectar una nueva oportunidad en la sobredemanda del mercado de eventos americano.

Hace 30 años, su primer proyecto inmobiliario de 100 viviendas básicas en la comuna de Parral, en la VII Región, estuvo lejos del glamour de la Quinta Avenida. Pero hoy están invirtiendo US$ 3 millones para remodelar los grandes salones de este edificio, teniendo especial cuidado en su conservación.

La construcción también quedará equipada para albergar tiendas y restaurantes, y estará lista en septiembre, justo a fines del verano neoyorquino.

Los altos y bajos de Pacal
Luego de décadas de trabajo, Pablo Castro dejó la gerencia general de Pacal hace dos años y hoy viaja todos los meses a Nueva York para el directorio de Brotherhood, en donde se queda una semana.

A pesar de este estilo de vida más "glamoroso" y lejos de las tensiones, Castro todavía conserva su sencillez y recuerda con cariño sus años de trabajo en que estuvo a punto de perderlo todo.

En plena crisis del 82, el sector construcción se paralizó, y los tres socios tuvieron que pedir préstamos y hasta hipotecar la casa que les prestó un amigo, para no declarar la quiebra. Y para sobrevivir, cada uno se dedicó a distintas actividades: Nelson Murúa en el área política siendo alcalde de Paine y San Miguel, Carlos Silva trabajando en las obras del Metro y Pablo Castro plantando remolacha en tierras familiares en Talca.

Pero, sin duda, 2008 ha sido el año para estos tres amigos. Recién lograron el punto de equilibrio de su viña Casas Patronales, exportando 100 mil cajas a 25 países, y hace menos de dos semanas anunciaron la adquisición del 100% de la empresa de créditos inmobiliarios Hipotecaria La Construcción, que tiene el 18% del mercado.

Hace 30 años, su primer proyecto inmobiliario de 100 viviendas básicas en la comuna de Parral estuvo lejos del glamour de la Quinta Avenida.

 Imprimir Noticia  Enviar Noticia