Iniciativa busca ampliar garantías de infraestructura e instalaciones de viviendas
jueves, 09 de agosto de 2018
Dierk Gotschlich
Nacional
El Mercurio
Proyecto propone que seguros rijan desde que el dueño habita el inmueble y no desde la recepción municipal.
Marcelo Meneses vive con su familia en una casa en el sector de Cumbres de la Viña, en La Florida, hace cuatro años y 10 meses. Relata que un día se despertó con un intenso olor a quemado: "Pensamos que la casa se estaba incendiando", dice. Finalmente, resultó ser un problema en las cañerías del inmueble, el que aún no logra solucionar. Como le entregaron la casa en octubre de 2013, pensó que estaba dentro del plazo de cinco años para acceder a la garantía de las instalaciones del hogar, pero se llevó una sorpresa al enterarse de que esta había caducado. "Presenté el reclamo a la inmobiliaria la primera semana de julio diciéndoles que tengo el acta de entrega, pero ellos me comunicaron que mi casa estaba sin garantía porque la recepción municipal fue en enero de 2013", explica. La Ley General de Urbanismo y Construcciones contempla que existen seguros cuando se compra una vivienda, en caso de que esta presentara defectos. Estos tienen un plazo de cinco años si se trata de problemas en las instalaciones del inmueble, y de 10 si son defectos de infraestructura. De igual forma que le ocurrió a Meneses, cuando se habla de estos seguros, los propietarios suelen pensar que estos comienzan a regir desde que ellos habitan el inmueble, pero la realidad es otra, pues ambos plazos se contabilizan desde la recepción de la obra por parte de la Dirección de Obras Municipales (DOM) respectiva. Y pueden pasar meses, e incluso años, antes de que la casa sea entregada a sus dueños, lo que reduce significativamente el tiempo de garantía, lo que afecta la posibilidad de obtener una reparación o indemnización por parte de la inmobiliaria. Proyecto de ley Modificar esta situación es lo que busca un proyecto de ley ingresado al Congreso ayer por la diputada Ximena Ossandón (RN), quien explica que la iniciativa "viene a corregir una desprolijidad" de la Ley General de Urbanismo y Construcciones. "Es justo que las personas vivan en sus viviendas con una garantía desde el minuto en que ellas las empiezan a habitar, porque allí es cuando la casa o el departamento se prueba y se conocen los defectos que puede tener y si quedó bien construida", comenta. En eso concuerda Meneses, quien dice "yo me sentí estafado, porque uno no debería estar obligado a conocer todos los detalles de la ley, sino que espera que la información sea lo más transparente posible, considerando que la garantía es el único poder que tiene el consumidor para reclamar si un producto le salió malo", comenta Meneses. También reclama que, a diferencia de la infraestructura, las fallas en las instalaciones del inmueble (como los servicios básicos de alcantarillado, agua potable, luz y gas) solo pueden evidenciarse cuando ya han sido utilizadas con la frecuencia que implica habitar en ese lugar, por lo que resulta "ridículo" que el plazo de la garantía comience a regir desde antes de eso. "Además -agrega-, el tema de la vivienda es muy sensible porque vivimos en un país sísmico, por lo que se trata de un bien muy preciado para todos los chilenos".
Pueden pasar años del inicio de la garantía antes de que un propietario habite su nuevo hogar.
