sábado, 28 de junio de 2008
Desde Washington...Karlfranz Koehler D., Master Georgetown University Law Center
Economía y Negocios Online, El Mercurio
"Hay dos conceptos que debieran aplicarse en Chile: capacidad de planificar y ejecutar a largo plazo, y "accountability".
202 compañeros provenientes de 67 países y que hablábamos 42 idiomas componíamos la generación 2008 de LL.M. en Georgetown.
Casi todos ellos sabían algo de Chile; pero la belleza de nuestros paisajes y los sobresalientes mostos fueron el común denominador. Más de alguno sabía también de nuestros pasados éxitos en materia económica.
Sin embargo, tras haber conversado con abogados americanos de prestigiosas oficinas y organismos financieros internacionales, pude constatar que los neg o c i o s d e e l l o s s e e s t á n enfocando actualmente más bien en Colombia, el Perú, y por supuesto, como los mismos brasileños lo denominan en el "pais mais grande do mundo".
¿Nos habremos dormido en los laureles? Michael Porter, profesor de Harvard de visita hace un tiempo en nuestro país, señaló que, si bien Chile todavía estaba un par de peldaños arriba de los demás países latinoamericanos, ha bajado en su nivel de competitividad en relación con los países desarrollados.
En el "IMD World Competitiveness Yearbook 2008" Chile aparece en el lugar 26, siendo que el año 2005 ocupaba el puesto 18. Sin entrar en el análisis de dichas cifras ni en las medidas que deben adoptarse para mejorar nuestra competitividad, me atrevo a sugerir dos conceptos muy presentes tanto en la órbita pública como privada de los EE.UU., que debieran aplicarse en Chile: 1. Capacidad de planificar y ejecutar a largo plazo.
2. "Accountability": que resulte posible identificar responsables en planificación y ejecución y hacer exigible esa responsabilidad.
Variados ejemplos muestran la carencia de dichos elementos en nuestro país, por lo que sólo "como muestra de un botón" identifico los siguientes: a) 30 años llevan los santiaguinos sin ver la cordillera y, hasta donde sabemos, no hay un plan de descontaminación definitivo que esté implementándose; b) Chile aún tiene más de 2 millones de pobres (última Casen) y todavía no sabemos cuál es el plan de erradicación y cuáles son los plazos pensados para hacerlo; y c) los chilenos están sufriendo el encarecimiento de la energía, los industriales empezaron a irse fuera del país y, hasta donde sabemos, aún no hay una política de desarrollo e implementación de nuevas fuentes de energía.
En síntesis, Chile tiene todas las condiciones para dar el "gran salto" al desarrollo, pero tanto los sectores público como privado deben salir del "área chica" y acordar los grandes temas. Así, en 20 años más, mi hijo León podrá contarle a los hijos de alguno de mis 202 compañeros los éxitos de hoy que serán el orgullo del mañana.
