jueves, 05 de junio de 2008
Economía y Negocios Online
En los primeros cuatro meses del 2008, la cifra general de importaciones chilenas de carne bovina, registra una caída de un 16,3% frente a igual periodo del 2007, con ingresos por sólo 27.031 toneladas, frente a las 32.313 que entraron en 2007.
SANTIAGO.- Después de la crisis de aftosa del 2005, Argentina había logrado posicionarse como nuestro principal proveedor de carne bovina, con más del 50% del mercado de importaciones de este producto. Sin embargo, la inestabilidad interna y los conflictos del Agro con el gobierno trasandino, terminaron por afectar los ingresos de carne a Chile.
Es así como en los primeros cuatro meses del 2008, la cifra general de importaciones chilenas de carne bovina, registra una caída de un 16,3% frente a igual periodo del 2007, con ingresos por sólo 27.031 toneladas, frente a las 32.313 que entraron en 2007.
En cuanto al país de origen, toma el liderazgo Paraguay con 12.847 toneladas, un 47,5% del mercado y un alza de 5,6 5 frente al periodo anterior. Argentina queda en segundo lugar con 11.234 toneladas, un 41,6% de participación de mercado y una caída de 26%.
En tercer lugar se ubica Uruguay con 1.788 toneladas, una variación de – 33,3% y un 6,6 % del mercado. Finalmente, en cuarto lugar permanece Brasil con 1.163 toneladas, una reducción de 49,1% y un 4,3% del mercado.
Por empresas, las dos principales cadenas de supermercados continúan liderando con el 41,3% del mercado: Cencosud en primer lugar con 5.708 toneladas, una reducción de 30,1% frente al ejercicio anterior y un 21,1% del mercado. En segunda posición, D&S con 5.455 toneladas, una caída de 19,6 y un 20,2% del mercado.
El gerente general de Global Trade Company, Alejandro Maira, explicó que “se están empezando a notar los graves efectos que puede tener para Chile el conflicto entre el Agro y Gobierno trasandinos”.
"Lamentablemente, en esta época Chile tiene menor producción de carne por un tema estacional, por lo que habrá menos oferta local disponible. Esto, sumado a la reducción de las importaciones, va a tener un importante efecto en el aumento de los precios y en la caída del consumo interno de carne bovina", indicó Maira.
