jueves, 05 de junio de 2008
Hernán Cisternas
Economía y Negocios Online, El Mercurio
Estatal elevó a US$ 3.200 millones su endeudamiento de corto plazo fundamentalmente por los actuales precios del crudo.
Tras la cuenta pública que el gerente general de Enap, Enrique Dávila, entregó ayer al Senado, donde se conoció que el endeudamiento de la compañía ha llegado en el último año y medio a US$ 3.200 millones, el senador Eduardo Frei, presidente de la Comisión de Hacienda, advirtió que "no me gusta que Enap se vea comprometida ni se vea perjudicada" por el rol que cumple en el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC).
El parlamentario planteó que en vez de disponer una rebaja del impuesto a los combustibles, el Gobierno inyectará US$ 1.000 millones al fondo. Frei recordó que hace un año advirtieron a Hacienda que venían tiempos difíciles por la crisis del crudo, "pero un año después seguimos tomando medidas de parche y seguimos enfrentando dificultades".
El senador Ricardo Núñez (PS), presidente de la Comisión de Minería, señaló que la Enap "no debe ser la institución dedicada a resolver el impacto que el alza del precio del petróleo provoca en los chilenos" y sostuvo que la función de la estatal "es muy distinta. Debe producir petróleo (en Chile y en el extranjero); producir gas, generar condiciones para la explotación de la geotermia y ser una empresa rentable (como lo ha sido), pero en ningún caso resolver problemas que competen a las autoridades, en especial a Hacienda". Opinión parecida tuvo Evelyn Matthei (UDI), para quien el endeudamiento de la Enap es preocupante y señaló que hay que entender que las empresas públicas no son del gobierno de turno, sino del Estado.
La parlamentaria dijo que de la cuenta quedaron varias dudas que espera que sean resueltas. "Deberíamos lograr que el Congreso tenga cierto grado de participación y conocimiento de las decisiones que toman las empresas públicas, porque a veces éstas no tienen el debido contrapeso".
Baldo Prokurica (RN), vicepresidente del Senado, dijo que hubo anuncios que "me parecen llenos de luces rojas respecto a lo que puede ocurrir, porque el endeudamiento subió a US$ 3.200 mills. Eso no está bien".
Durante la exposición, Dávila explicó que el aumento de la deuda de corto plazo se debe a las mayores compras de crudo, a la importación de diésel y a los altos precios que tienen hoy el petróleo y sus derivados, a su vez que valoró la inyección de US$ 250 millones, anunciada el lunes por la Presidenta Bachelet.
Para el ejecutivo del punto de vista financiero, ese aporte es un apoyo a la gestión de la Enap y "significa aumentar nuestro patrimonio y tener una carga financiera para la compra de crudo, para el refinamiento de diésel y para que la operación sea normal. Es una señal de que el dueño de la empresa está preocupado para que funcione bien desde el punto de vista financiero y patrimonial".
En círculos cercanos a Enap se calificó la inyección como reflejo de la preocupación del Gobierno por la posibilidad de que la elevada deuda afecte su clasificación de riesgo y su imagen ante los proveedores.
