viernes, 30 de mayo de 2008
Franco Vera Mejías
Economía y Negocios, El Mercurio
Empresarios se reunieron ayer para celebrar el inicio de evaluaciones previas.
Los empresarios congregados en la Asociación Gremial de Industriales Gráficos de Chile (Asimpres) se reunieron ayer en el Hotel Hyatt para dar comienzo a una serie de evaluaciones tendientes a alcanzar un Acuerdo de Producción Limpia (APL), el que se realizaría entre los privados y diversas entidades públicas para dar un marco general que regularice el modo en que éstas cumplan con las exigencias, al tiempo que se explicita cuáles son las exigencias que son fiscalizables en esta industria.
Los acuerdos de producción limpia ya existen desde hace 10 años en el país, y han sido adoptados por diversos grupos de industriales, como empresas químicas, salmoneras, entre otras.
Germán Mayo, director ejecutivo de Asimpres, reconoce que todo lo relacionado con nuevas normativas y restricciones trae ciertas complicaciones a los empresarios, por las acciones concretas y obligaciones que esto conlleva. "Lo que estamos buscando acá es justamente lograr un consenso. Hoy llega un inspector y pregunta una cosa, y luego otro inspector y pregunta una distinta. Entonces, en la desinformación está la angustia de no poder responder en forma adecuada", acota.
Lo que busca, entonces, Asimpres es llegar a un protocolo de cómo, dónde y qué temas se deben enfrentar.
Al igual que cualquier industria, la de la impresión genera ciertas externalidades que no son deseadas, como la contaminación que emite cierta clase de químicos y solventes utilizados en esta industria. Es justamente lo que se pretende regular, pero de una manera amable, en comunicación constante entre los involucrados y sin forzar a nadie, de manera que la adhesión a este acuerdo es absolutamente voluntaria.
"Lo que buscamos es llegar a un acuerdo que nos permita establecer un protocolo de cumplimiento al acuerdo y de fiscalización de esas normas", concluyó Germán Mayo.
