jueves, 29 de mayo de 2008
R. Zanetta y J. Preller
Economía y Negocios, El Mercurio
Pese a que son menos accesibles y en general más riesgosos, muestran condiciones atractivas para realizar negocios.
Así como el mercado peruano se ha convertido en el orgullo de la región -con tasas de crecimiento del PIB que bordean el 9,3% en el primer cuarto del año y niveles de inflación que no superan el 5% en doce meses-, hoy existen otras latitudes emergentes en las que los grandes inversionistas están apostando.
Es en ese contexto que Pablo Salcedo, gerente Estrategias de Inversión de Compass Consorcio, sugiere como un ejemplo atractivo el caso de Vietnam. Con una capitalización bursátil de más de US$ 10 mil millones y una población que supera los 86 millones de habitantes, su economía muestra condiciones similares a las que ostentaba China hace 10 años.
Salcedo apunta a que aunque su mercado de capitales aún no es lo suficientemente profundo, el país sí constituye una oportunidad, particularmente por el desarrollo de infraestructura que ha mostrado en los últimos años.
Con esta recomendación coincide también Roberto Darrigrandi, de Tanner, quien destaca el mercado vietnamita como un polo atractivo gracias a políticas pro inversión y un ambiente propicio para los negocios. Esto lo avala el último informe Doing Business de 2008: en un año, Vietnam avanzó 10 puestos en lo que a protección de la inversión se refiere y tres ubicaciones en el ranking general.
Otro sector seguido de cerca por los inversionistas son los países de Europa del Este. Darrigrandi apunta por ejemplo el caso de Estonia, país que ostenta uno de los ingresos per cápita más altos de Europa Central. El intercambio de tecnología y productos electrónicos es uno de los puntos que lo vuelven atractivo, pese a su alto déficit de cuenta corriente.
En relación a Europa del Este, Fernando Ossa, subgerente de Fondos Internacionales de la AGF de LarrainVial, explica que están sobreponderando Rusia, sobre todo por su producción de petróleo, gas y energía, además de productos mineros.
Bélgica, Singapur y Turquía son los países menos tradicionales que están bajo la lupa de Alejandro Hirmas, director de Banco Penta. El ejecutivo destaca que para poner los ojos en esos mercados es relevante considerar factores como las proyecciones de crecimiento, sus tasas de interés y las valorizaciones de sus mercados.
Pese al atractivo, explica que para los inversionistas locales sigue siendo más fácil invertir en países más conocidos y accesibles, como Colombia o Perú.
Por su parte, Matías Braun, de IM Trust, plantea que todos los países emergentes son interesantes para invertir. Esto, principalmente por los buenos retornos, los que los convierten en plazas atractivas pese a que actualmente estén "caros".
Braun destaca el caso de Perú, ya que considera que las potencialidades de ese mercado se mantienen gracias a la pronta obtención del grado de inversión. "Esta categoría significa un alza de 10% de todos los activos financieros, cosa que hasta el momento en Perú aún no ha sucedido", señala.
