miércoles, 14 de mayo de 2008
Economía y Negocios
En seminario de la Asoex se discutió el futuro de la principal fruta de exportación.
En medio de los problemas por el tipo de cambio, el aumento en los costos energéticos y la inestabilidad de la mano de obra, Alejandro Barros, gerente de Aconex (Exportadora Aconcagua, una de las principales firmas del sector), realizó ayer en el seminario sobre la uva de mesa organizado por la Asoex un análisis de la industria centrando sus reparos en el propio actuar de los productores.
Para Barros, los principales problemas se deben a que el país no ha sabido sacar provecho a la uva de mesa, errando los caminos de comercialización; a la vez que los productores deben mejorar la calidad de sus frutas, desarrollándolas en los valles correspondientes a las potencialidades de las variedades. "Los comercializadores se han quedado atrás, y los productores también lo han hecho, enviando frutas que no deberían ser comercializadas", dijo el ejecutivo.
Aunque su discurso fue autocrítico, Barros también lanzó palabras contra el Gobierno. Considera que "ha actuado tarde y con poca fuerza; el dólar sube ahora que ya están pagados casi todos los retornos".
Esta postura fue respaldada por el presidente de Fedefruta, Rodrigo Echeverría, quien afirmó que el "mea culpa" realizado por Barros es correcto, pese a que muchos productores podrían sentirse tocados. "Tenemos que asumir una especialización, y ése es el costo; el que no tiene la infraestructura para asumir ese desafío, no va a tener el mejor escenario", afirmó.
