miércoles, 14 de mayo de 2008
Economía y Negocios
Decisión del máximo tribunal fue contundente: la autoridad sólo puede constatar infracciones precisas a la normativa.
La Corte Suprema infligió una derrota histórica a la Dirección del Trabajo (DT): quedó establecido que la entidad fiscalizadora no tiene facultades para enfrentar controversias jurídicas, aunque por años haya interpretado, de facto, la naturaleza de los contratos.
Tanto, que rápidamente el PS anunció un proyecto de ley que le reconocería, al menos, un rol secundario, al dotarla de competencias para formular denuncias ante los tribunales. Este se suma al que, según el ministro Andrade, evalúa el Gobierno.
Varios laboralistas de la plaza coinciden en que una salida legislativa implica reconocer la derrota de la DT: "La Inspección siempre estableció vínculos laborales, pasando por encima de sus atribuciones. Lo que pasaba es que el grueso de los empresarios fiscalizados acataba. El error de Patricia Silva fue acumular una cantidad inimaginable de derrotas", dice un experto en el tema.
"El estado de ánimo adentro de la DT está en el suelo. La institución siempre peleó esa facultad y con el fallo perdió posicionamiento. Patricia Silva operó con voluntarismo, sin medir las consecuencias y mató una institución que era temida y que siempre estableció relaciones contractuales sin tener ninguna atribución para hacerlo".
El asesor laboral Huberto Berg aclara que el fallo de la Corte hace que las cosas vuelvan a su orden normal: "Por eso es tan importante, porque la mayoría de las empresas pequeñas y medianas prefería acatar lo que la Inspección les decía y evitarse que las siguieran multando discrecionalmente".
Como no existe una norma que permita a la autoridad fiscalizadora llevar casos ante tribunales -y no puede dirimir por sí sola-, cada vez que se presenten episodios como el que enfrentó Codelco, la DT tendría que cruzarse de brazos.
Esto, siempre y cuando no se le dote de nuevas competencias. El integrante de la Comisión de Trabajo del Senado Juan Pablo Letelier (PS) rechazó el criterio utilizado por la Corte y anunció una iniciativa que permita a la autoridad denunciar estos casos ante la justicia.
En la misma línea, el profesor de Derecho Laboral de la Universidad Diego Portales, José Luis Ugarte, cree que el fallo de la Corte cierra el debate jurídico (aunque hay jurisprudencia contradictoria), pero deja todo en la arena política.
"Lo que debería pasar ahora es que se entregara competencia a la Dirección del Trabajo para denunciar (...) Supongo que al menos vamos a estar todos de acuerdo en que los tribunales sancionen".
El laboralista de Ernst & Young Mauricio Peñaloza, en tanto, destaca que con este fallo se cierre un viejo debate: "Los únicos que pueden resolver controversias jurídicas son los tribunales".
Aclara, además, que la DT no se queda inerme -como hacen ver algunos-, sino que tendrá que ceñirse a las tareas para las que está creada: constatar infracciones claras a la normativa.
