Dólar Obs: $ 948,61 | -0,72% IPSA -0,25%
Fondos Mutuos
UF: 37.237,20
IPC: 0,40%
Explosión del sábado no habría dejado daños estructurales graves:

Sanatorio Alemán se da un plazo de 60 días para volver a atender pacientes a plenitud

martes, 24 de abril de 2018

EQUIPO DE CRÓNICA
Nacional
El Mercurio

Los plazos urgen porque la clínica de Concepción es un complemento relevante para la red pública de salud ante la próxima campaña de invierno.



Por segunda vez en cuatro años, el Sanatorio Alemán tendrá que ser rescatado. Pero a diferencia de 2014, cuando faltaba capital para frenar una quiebra que habría puesto fin a una historia centenaria, esta vez habrá que reconstruirlo físicamente, debido a la explosión de gas que el sábado mató a tres personas y dejó heridas a más de cuarenta.

Mientras la llamada "zona cero" sigue cerrada por los peritajes que realiza el Laboratorio de Carabineros para descubrir las causas de la tragedia, ayer, el resto de la clínica volvió a funcionar parcialmente, aunque con sus instalaciones reducidas a un 30%, debido a los daños que dejó la violenta honda expansiva.

Luego de priorizar el traslado y atención de los 119 pacientes que estaban internados a la hora de la explosión, los encargados del sanatorio -que no está ligado a la red de clínicas alemanas que funciona en ciudades como Santiago, Valdivia y Osorno- se enfocaron en evaluar los daños estructurales.

Vidrios y tabiques

Reacia a hablar sobre el origen de la explosión -tema que deja en manos del Ministerio Público, al que dice estar prestando toda la colaboración necesaria-, Mónica Álvarez, miembro del directorio y parte de una de las familias controladoras del centro de salud privado, asegura que "los daños (en infraestructura) son menores a los que inicialmente habíamos estimado".

Si bien aún no hay una cuantificación económica, añade, la revisión de ayer permitió constatar que las torres ajenas a la "zona cero" -en las que funcionan servicios como urgencia, pabellones y consultas médicas- presentan rotura de vidrios, de tabiquería y de puertas, además de caída de cielos falsos. El servicio oncológico, en cambio, requiere que sus muros sean reforzados para permitir una inspección más detallada.

Ayer se diseñó un plan que contempla iniciar la limpieza y reconstrucción de las dependencias sin daño estructural, luego de lo cual las autoridades sanitarias deberán aprobar la puesta en marcha global del recinto.

"Hay zonas, como la urgencia, que tienen muy poco daño y estimamos que deberíamos demorar una semana en la reposición de vidrios y la limpieza", precisa Álvarez, poniéndose en un escenario optimista. "En otras zonas, que están más comprometidas, tenemos cronogramas de actividades de aproximadamente 45 a 60 días", agrega.

Los plazos son relevantes, porque el sanatorio es un complemento importante de la red pública de salud ante la próxima campaña de invierno.

En paralelo, en 2017, el recinto se adjudicó $1.532 millones del Estado por compras de prestaciones y días cama para solucionar problemas de salud de pacientes para los que no había cupo en los recintos públicos.

-¿Cómo afecta esto a la marca del Sanatorio Alemán?

-La verdad es que no hemos dimensionado el daño de imagen. Tenemos 120 años de historia unidos a la comunidad penquista y al sur de Chile. El compromiso con nuestros pacientes, el desarrollo que hemos creado y toda nuestra historia nos va a respaldar y hará que la comunidad valore los esfuerzos que se han hecho durante muchos años y volver a la actividad rápidamente, porque este es un centro de vital importancia para lo que es la red de salud del sur de Chile.

Respecto de la atención a pacientes, la directora médica de la clínica, Paulina Romagnoli, informó que el servicio de urgencia está limitado en imágenes, pues solo realiza ecografías y radiografías básicas, mientras los exámenes de laboratorio únicamente están disponibles para los hospitalizados. Agregó que habrá continuidad para las quimioterapias, sobre todo a las infantiles, pues son el único centro autorizado en la zona.

Más complejo es el panorama de las consultas médicas, a las que se intenta hacer espacio en edificios anexos, como la torre 120 años y la Clínica de la Mujer.

Álvarez detalla que la recuperación tras la cuasiquiebra estaba en desarrollo, porque en el camino surgieron nuevas demandas de la comunidad, pero que ahora los planes quedarán en pausa para priorizar la reconstrucción.

Continuidad laboral
El Sanatorio Alemán aseguró la continuidad laboral de sus más de mil trabajadores, incluido el prevencionista de riesgos que fue grabado mientras instruía volver al recinto momentos antes de la explosión.

 Imprimir Noticia  Enviar Noticia