viernes, 18 de abril de 2008
Economía y Negocios, El Mercurio
Autoridad acusó a la compañía de imponer cláusulas de exclusividad.
Como "una sobreactuación" y una medida "inexplicable" de la Fiscalía Nacional Económica catalogó el presidente de CCU, Guillermo Luksic, la demanda presentada ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) en contra de la filial cervecera de la compañía -líder del mercado con el 86% de las ventas-, por abuso de posición dominante.
Según el Fiscal Nacional Económico, Enrique Vergara, Cervecera CCU Chile impone a los canales de distribución conocidos como "Clientes Imagen" -restaurantes, hoteles, pubs, bares y discotecas- cláusulas de exclusividad en los contratos, con el fin de impedir la venta de productos de sus competidores.
"Queremos dejar claro que esta acusación no tiene asidero por ninguna parte, ya que no son contratos de exclusividad, sino de imagen, y por supuesto no buscamos la exclusión de nuestros competidores; si fuera ése el caso, cerraríamos estos contratos con los clientes que venden más cerveza (...), como supermercados o grandes distribuidores", sostuvo Luksic tras la junta de accionistas de CCU.
El directivo dijo además que este tipo de contrato representa 2,8% de los clientes de CCU Chile y 4,3% de las ventas totales.
En la contestación a la demanda, el abogado de CCU, Cristóbal Eyzaguirre, dijo que la FNE pretende que se prohíba a la compañía este tipo de contratos, "mientras sus competidores continuarán haciéndolo, lo que equivale a prohibir a mi representada que haga uso de un legítimo recurso de marketing efectivo y necesario para competir leal y en igualdad de condiciones con sus competidores".
US$ 470 mills. de inversión
El gerente general de CCU, Patricio Jottar, anunció inversiones por US$ 470 millones en el período 2008-2010.
"Invertiremos en todas las áreas donde estamos creciendo (...) en el negocio del pisco, más líneas de producción de néctares, ampliación de operaciones en Argentina y una expansión en el área de té helado", dijo.
Del total, unos US$ 10 millones serán destinados para la nueva planta de Calaf en Talca.
