Atado a su peyorativa carga histórica, el Tricolor de Paine vuelve a escena
sábado, 24 de marzo de 2018
Claudio Herrera
Deportes
El Mercurio
Nadie más malo que el conjunto centenario, remarca el malsano refrán. El mito forjado en un partido todavía en la nebulosa es utilizado como "trampolín" por su regencia para recuperar el terreno perdido. El peculiar desafío de competir en la quinta división del fútbol chileno, una logística interna hecha a pulso y el sueño de jugar lindo.
"Cuando adverso el destino se torna, en su alma no anida el rencor, esperando optimista, que un futuro promisor, dé a sus huestes el ansiado galardón", reza el remate del himno del Tricolor Municipal de Paine, el legendario club, cuya postulación a Tercera B 2018 fue aceptada por la ANFA. "El médico", dice sin dudarlo Felipe Silva, vicepresidente del club painino, cuando repasa la mayor dificultad que les deparó completar el cuaderno de cargos para salir del ostracismo que padecen desde 2003, cuando jugaron en la extinta Cuarta División. "Siempre nos dicen 'Más malo que el Tricolor de Paine', nos conocen por eso en todos lados, pero no es una carga, agradecemos al que inventó esa frase, ese partido con Colo Colo nos ha hecho famosos todos estos años, no es ninguna ofensa, es parte de la historia, aunque no se contó completa: nadie dice que después Colo Colo vino a Paine y perdió 1-0 con (Carlos) Caszely incluido. Es parte del folclore, no hay resentimiento", dice el dirigente, mientras trabaja personalmente en extirpar las champas de pasto del Estadio Municipal, recinto al cual, cuentan los parroquianos, alguna vez llegó el meta del Manchester City Claudio Bravo a pedir una camiseta. El cartel de equipo débil narran en el club que pasó por cuatro nombres (antes se llamó Bandera, Tricolor Royal y Tricolor Nacional), se forjó en 1959, en el mismísimo Estadio Nacional. "No fue para tanto. Le cuento: el día que Colo Colo jugó con el Santos de Pelé, con el Nacional lleno, invitaron al Tricolor a jugar un preliminar ante una filial colocolina de Puente Alto, pero esta no se presentó y al final pusieron a las 'revelaciones', que era una cuarta especial de Colo Colo. La gente decía que nos ganaron 13-0, 14-0, pero nos pasaron 8-2, esa es la verdad. E incluso al arco nuestro jugó el chofer que llevó al equipo, fue todo improvisado", detalla Luis Eduardo Tamayo (78), ex dirigente y septuagenario hincha del club. Las crónicas aparecidas en los 50 años posteriores a 1959 repiten la tesis de la insólita jornada, aunque historiadores del derrotero albo no dan fe del partido en cuestión. "He rastreado todos esos años y no aparece en ningún lado el encuentro", advierte el docente Sebastián Salinas. "No sale en la prensa, puede que haya sido un partido a muy temprana hora, no sé, el primero de cuatro preliminares, algo así", insiste Fabián Valenzuela, titular del dominio Datos Albos. En rigor, dos diarios de la época dan cuenta que el 15 de abril de 1959, en la antesala de Colo Colo-Santos (6-2) se midieron Ñublense y Thomas Bata de Peñaflor. "Pero si dos de mis tíos, Gilberto y Raúl Sepúlveda (luego jugaría en Ferrobádminton), jugaron ese partido. Sí existió. El problema fue que el Tricolor no tenía arquero, los muchachos se fueron en un camión, que estaba cargado de sandías, llegaron como 10 minutos antes del partido, se equiparon y salieron a jugar. Se burlan de nosotros por eso, es el peso de la historia, pero igual somos famosos", se consuela Juan Sepúlveda (70 años), coordinador de las series menores. Sergio Livingstone incluso le dedicó una columna reivindicatoria en 1969 al aire despectivo que rodeaba el devenir del Tricolor. "Una crueldad sin base", escribió el "Sapo" sobre la institución que tiene como leyenda a Atanasio Pardo (el primer chileno que jugó en España) y que alguna vez definió cartillas ochenteras de la Polla Gol. "Históricamente se ha destacado a Tricolor como el más malo de Chile y eso nos ha servido como trampolín para desarrollarnos. No olvidemos que el club data de 1910. Está a la par con las instituciones más señeras del país", apunta el presidente, Francisco Aravena. Contra el equipo de Vidal En materia deportiva, Tricolor trabaja contra el tiempo: busca estructurar un plantel sub 23 (se permiten cinco excepciones hasta 25 años), idealmente con gente de casa. Ahí está considerado Giovanni Sotelo, sobreviviente del bus que volcó hace un mes en Mendoza con escuelas de fútbol. "Lo que apuró la decisión de postular a Tercera B fue que teníamos una sub 17 muy buena, pero hasta ahí llegábamos y no podíamos seguir desperdiciando el talento de la comuna. Lautaro -rival clásico- tiene más recursos, puede decir 'quiero a este, este y este', los paga y los lleva. Nosotros no, le daremos prioridad a jugadores de la zona", comentan los paininos, incrustados en el Grupo 2 de la categoría donde la atracción es Rodelindo Román, el club de Arturo Vidal. El equipo está al mando de la dupla técnica que conforman Jorge Pizarro y César Fuentes, dos egresados del INAF. "Con las ojotas y la pala le ganamos al que venga", suele arengar Fuentes, mientras que su colega no se amilana y sueña con salpicar el método holandés. "Queremos darle un valor agregado al juego del Tricolor y sacar ese estigma (del peor equipo). Soy un admirador del juego de Johan Cruyff y nuestra propuesta será la posesión de balón y un ataque construido. Sabemos que en la categoría se juega mucho al ataque directo, pelotazo en busca de un delantero grande que aguante, pero nosotros queremos darle otro toque. Amplitud, profundizar y presionar mucho, un equipo corto", augura Pizarro. En el club, cuyo funcionamiento se puede empinar por el millón y medio de pesos mensuales, dicen que "cortar menos de 300 boletos" en las jornadas de local será un fracaso. Existe una iniciativa para que el relator radial Juan Carlos Carabantes narre las jornadas en el fortín de Paine. El estreno será el 8 de abril ante Brisas del Maipo. El infame dicho ya no incomoda. "El sello del club es 100% social, todo lo hacemos con mucho ñeque. El dicho del equipo más malo del país nos ha servido como trampolín". FRANCISCO ARAVENA, presidente de Tricolor
