Dólar Obs: $ 948,61 | -0,72% IPSA -0,25%
Fondos Mutuos
UF: 37.242,15
IPC: 0,40%
Primera Ministra británica exigió explicaciones al Kremlin:

May acusa "alta probabilidad" de que Rusia haya envenenado a ex espía

martes, 13 de marzo de 2018

Benjamín Mejías Valencia
Internacional
El Mercurio

Tras una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad Nacional, la líder reconoció en el Parlamento que el ataque al ex agente ruso y su hija habría sido planificado. Moscú acusó un "espectáculo circense".



La Primera Ministra británica, Theresa May, validó ante el Parlamento las sospechas que ya había deslizado la semana pasada el canciller Boris Johnson. Según May, es "altamente probable" que Moscú haya tenido responsabilidad en el ataque con un agente nervioso contra el ex espía ruso Sergei Skripal (66) y su hija Yulia (33), la semana pasada, en la ciudad de Salisbury, al sur de Inglaterra.

La jefa de gobierno aseguró que expertos de su país confirmaron que el veneno utilizado contra el ex espía y su hija pertenecía a la serie Novichok ("novato", en español), una sustancia producida en la ex Unión Soviética que tiene cerca de 100 variantes y que se considera como uno de los más peligrosos en el mundo.

May prometió también discutir con el Parlamento medidas contra Rusia "si no hay una respuesta creíble", aunque sin precisar detalles.

"No vamos a tolerar un intento tan descarado de asesinar a civiles inocentes en nuestro territorio", advirtió la Mandataria, quien dijo que barajan dos alternativas: se trataría de una "acción directa por parte del Estado ruso", o bien, que Rusia "perdió el control" de sus provisiones del veneno.

Previo a sus declaraciones, la Premier había convocado a una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad Nacional, en la que participaron representantes del ámbito político, de los servicios secretos y de las fuerzas de seguridad.

El canciller Johnson dio un ultimátum a la embajada rusa en Reino Unido para que responda a las imputaciones de May. El ministro agregó que Moscú debe explicar los hechos ante la Organización para la Prohibición de Armas Químicas. A través de un comunicado, la sede diplomática en Londres precisó que solicitaron información del estado de salud de Skripal a Downing Street y advirtió que el gobierno del Reino Unido "está arriesgando a largo plazo nuestras relaciones".

Desde Moscú desestimaron las acusaciones. El Presidente Vladimir Putin dijo que analizarán el caso, "una vez que las autoridades del Reino Unido lo hayan solucionado", mientras que la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, consideró que el discurso de May en la Cámara de los Comunes se trató de un "espectáculo circense".

La Casa Blanca, por su parte, se alineó con la teoría británica. "Tenemos plena confianza en la investigación del Reino Unido y en su conclusión de que Rusia es probablemente responsable del ataque con un agente nervioso que tuvo lugar la semana pasada en Salisbury", dijo anoche el secretario de Estado de EE.UU., Rex Tillerson. "De Ucrania a Siria -y ahora en el Reino Unido-, Rusia sigue siendo una fuerza irresponsable de inestabilidad en el mundo, actuando con un desprecio general a la soberanía de otros Estados y la vida de sus ciudadanos", añadió.

Skripal trabajó para la inteligencia militar de Rusia antes de ser reclutado como doble agente británico. Luego de un canje con el Kremlin, en 2010, salió en libertad y se asentó en Salisbury.

Autoridades y analistas han comparado el caso con el asesinato del ex espía ruso Alexander Litvinenko, envenenado con un té con sustancias radiactivas, en Londres en 2006. Una investigación concluyó que el crimen "posiblemente" fue autorizado por el propio Presidente Putin.

"Gran Bretaña puede acudir a organismos internacionales. Se ha sugerido también que el Reino Unido podría remitir a Putin a la Corte Penal Internacional, aunque Rusia podría vetarlo. Sin embargo, sería simbólico. Podría haber sanciones contra las personas para ejercer presión", afirmó a "El Mercurio" Erik Goldstein, académico del Centro de Estudios en Seguridad y Diplomacia de la Universidad de Birmingham.

Goldstein cree que, de ser reales las imputaciones, Putin podría estar haciendo un aprovechamiento político de la situación de cara a las elecciones presidenciales del 18 de marzo. Sería una forma de mostrar fortaleza, en función de "intereses políticos internos", indicó.

"Este acto ha sucedido en un contexto de un patrón arraigado de agresión de parte del Estado ruso".
Theresa May
PRIMERA MINISTRA DEL REINO UNIDO

 Imprimir Noticia  Enviar Noticia