martes, 08 de abril de 2008
La Nación de Buenos Aires / GDA
Las estrategias de acuerdos de precios para frenar las alzas de los cortes populares no dieron resultado: según un relevamiento de las entidades de defensa de los consumidores, la carne vacuna y de pollo están entre un 60 y un 100% más caras que las fijadas por el Gobierno.
BUENOS AIRES.- El precio de la carne no para de subir en Argentina. La demanda de los consumidores, tampoco.
Las estrategias de acuerdos de precios para frenar las alzas de los cortes populares no dieron resultado: según un relevamiento de las entidades de defensa de los consumidores, la carne vacuna y de pollo están entre un 60 y un 100% más caras que las fijadas por el Gobierno.
Sin embargo, a pesar de las alzas, la demanda no cede. Así lo confirmó el vicepresidente de la Asociación de Propietarios de Carniceros de la Capital Federal, Alberto Williams. Según dijo, "aunque los precios aún están elevados como consecuencia de los días de paro, los consumidores no bajaron sus niveles de compra".
Según el último informe de la Cámara de la Industria y Comercio de Derivados de la República Argentina, el consumo por habitante se ubicó en 68,5 kilogramos en febrero pasado, tomando el promedio móvil de los últimos doce meses. En términos interanuales implica un crecimiento del 5,8%.
Así es que la suba de precios se consolida. "La demanda es buena, la gente compra igual", dijo Williams. Según estimó, la venta de carne se mantiene firme y con una tendencia alcista que registra desde la recuperación de 2001.
La falta de alimentos económicos alternativos a la carne vacuna podría explicar que el consumidor regrese a las carnicerías a pesar de los precios en alza.
