miércoles, 02 de abril de 2008
EFE
"Vamos a abastecer las ciudades y buscar otros métodos de lucha. Este es un punto de inflexión, pero la lucha continúa hasta la victoria", dijo un dirigente.
BUENOS AIRES.- Las cuatro entidades que representan a los productores agropecuarios de Argentina anunciaron hoy la suspensión por 30 días de la huelga comercial y los bloqueos de carreteras iniciados hace tres semanas en protesta por los impuestos a las exportaciones de granos.
Las cúpulas de la Federación Agraria Argentina (FAA), las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), la Sociedad Rural Argentina (SRA)y la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) resolvieron el levantamiento de la medida de fuerza para buscar una concertación con el Gobierno.
"Vamos a abastecer las ciudades y buscar otros métodos de lucha. Este es un punto de inflexión, pero la lucha continúa hasta la victoria", dijo el dirigente rural Juan Echeverría, quien advirtió que los agricultores volverán en un mes a las rutas, si no son escuchados en sus demandas.
La suspensión de la huelga iniciada el 13 de marzo fue anunciada por los líderes rurales, en el marco de un acto convocado por los agricultores en la ciudad de Gualeguaychú (270 kilómetros al norte de Buenos Aires), epicentro de las protestas más enfervorizadas contra la política agropecuaria del Gobierno de Cristina Fernández.
Según los organizadores, unos 30.000 agricultores acudieron a este acto en defensa de los intereses de su sector.
El presidente de la CRA, Mario Llambías, dijo que durante la suspensión de la huelga comercial se analizará "una agenda" que incluya "soluciones" para el sector de granos, carnes de bovino y lácteos.
Además, comentó, pedirán la conformación de una "mesa de política agropecuaria permanente" con funcionarios que "tengan poder político de decisión" y "también conocimiento del sector".
El campo "sigue en estado de alerta y movilización", afirmó Llambías, quien recomendó a los agricultores vender “sólo lo necesario” de sus cosechas, si no les pagan "lo que corresponde".
En una proclama leída en el acto, las organizaciones del campo destacaron que la movilización de estos 21 días "no tiene precedentes en la historia” del país ni "tampoco se recuerdan antecedentes del apoyo caluroso y espontáneo de toda la ciudadanía".
"Algunos ingredientes de esta titánica y masiva manifestación relacionados con las vías de hecho no fueron objeto de nuestra decisión deliberada y serena: nos fueron impuestos por las circunstancias por todos conocidas y determinaron que fuera esa la única forma de lograr que se nos escuche", alegaron.
Los agricultores aseguraron que antes de iniciar la protesta habían "intentado hasta el cansancio vías normales" de diálogo con el Gobierno.
La huelga se había iniciado luego de que el Gobierno anunciara el 11 de marzo un nuevo esquema de impuestos a las exportaciones de soja, girasol, trigo y maíz, con tasa variable de acuerdo a los cotizaciones internacionales de estos granos.
El conflicto desató un duro enfrentamiento entre los hombres del campo y el Gobierno, que finalmente el pasado lunes anunció compensaciones a los pequeños productores, quienes en la práctica pagarán los mismos impuestos a las exportaciones que rigieron hasta el 11 de marzo.
Como parte de su protesta, los agricultores impidieron el paso de camiones con alimentos y materias primas para las industrias, lo que provocó desabastecimiento y problemas para la producción fabril.
La gran mayoría de los bloqueos a las carreteras ya han sido levantados y el abastecimientos de alimentos comenzó a normalizarse.
"Quisiéramos volver a la normalidad de la convivencia y el trabajo. Nuestro mayor deseo es que se restablezcan lo más pronto posible las condiciones que permitan un diálogo sereno y profundo", apuntaron.
"Esas condiciones no se deben simplificar con superficialidad, reduciéndose a nuestra aceptación inmediata de medidas que no resuelven el problema de fondo", indicaron las entidades en su proclama.
"Deseamos aportar propuestas, escuchar razones y buscar juntos las soluciones que no se agoten en los temas de coyuntura", añadieron, antes de reclamar que sea el Legislativo el que establezca los impuestos, en lugar del Ejecutivo. EFE
