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"El proyecto Florida":

Una imperdible joyita del cine independiente

viernes, 23 de febrero de 2018

ERNESTO GARRATT VIÑES
Reportaje
El Mercurio

Sean Baker, el director de esta película que se estrena el 1 de marzo en Chile -y por la que Willem Dafoe está nominado al Oscar a Mejor Actor Secundario-, explica sus intenciones para realizar un precioso filme sobre unos niños a la deriva en el patio trasero de Disney, en Orlando. Un comentario social magnífico en medio del materialismo de la era Trump que ha emocionado a expertos y público por igual. "El cine puede cambiar el mundo", dice él, convencido, en esta entrevista.



Sean Baker es un cineasta independiente "real". Este artista de 46 años ha hecho una carrera al margen de la industria de Hollywood y su calidad fílmica fue recompensada hace tres años cuando su filme "Tangerine", sobre la amistad de dos mujeres transgénero y su dura realidad, ganó Sundance. Filmado con tres iPhones, "Tangerine", hizo historia al ser la primera vez que dos actrices transgénero, Kitana "Kiki" Rodríguez y Mya Taylor, entraban a jugar en la campaña del Oscar apoyadas por un productor.

Aunque ninguna de las dos fue nominada, el recuerdo sirve para subrayar el intento de Sean Baker a la hora de mover las barreras de los temas tabú en los parámetros de la Academia, algo que sin duda ha sido beneficioso para la chilena "Una mujer fantástica", nominada a los premios Oscar.

Ahora Sean Baker -recuerde este nombre: Sean Baker- mueve otra vez la barrera de los temas invisibilizados en Hollywood. Este visionario autor ahora se está fijando en los "dejados de lado" del sueño americano, en su maravillosa cinta "El proyecto Florida": una hermosa fábula, contada desde el punto de vista de unos niños, sobre la pobreza "disfrazada" en la que viven familias después de la crisis subprime. Personas que con lo justo viven arrendando piezas de moteles y, en este caso, justo en el "patio trasero" de Disney. En ese microcosmos tan bien recreado por Sean Baker y su equipo, la cámara se fija en la pequeña Moonee (Brooklynn Prince) mientras deambula con sus amiguitos por estacionamientos, y también en la madre de esta niña, una mujer joven y agresiva (la estrella de Instagram Bria Vinaite). Ambas, a regañadientes, están de alguna manera bajo la protección del bien intencionado gerente del motel donde viven, interpretado por un impecable Willem Dafoe.

-¿Cómo fue trabajar con niños actores? ¿Tomar su punto de vista fue el plan desde el inicio?

-Sí, siempre supe que se iba a tratar de una historia en torno a niños. Y se trata del casting también, porque eso hará que tu película funcione o no. Así que nos tomamos el tiempo necesario para encontrar al grupo perfecto de niños. Por supuesto, el personaje de Moonee era muy importante: encontrar a Brooklynn para mí fue un sueño hecho realidad. Estaba muy enfocado en encontrar la Moonee perfecta y les decía a mis productores que íbamos a tener que postergar la producción si no dábamos con la persona indicada, así que cuando por fin la encontramos fue un gran alivio. Ella es increíble. Se puede ver en la película, es como Mickey Rooney o Jodie Foster; ella nació para esto.

Sean Baker también comenta las denuncias de acosos y abusos contra menores en Hollywood:

-Eso es algo muy triste, particularmente en esta industria, porque la consideramos como liberal y enfocada en hacer del mundo un lugar mejor. Ver esto dentro de nuestra propia infraestructura, resulta muy desalentador y desilusiona.

Lo que no le produjo desazón, pese a lo complicado que resultó, fue encontrar y luego trabajar con la estrella de Instagram, Bria Vinaite, quien no tenía estudios de actuación.

-Vivimos en tiempos en que las redes sociales e Internet han cambiado la forma de trabajar en cine y son una forma de encontrar nuevos talentos. Yo lo hice un poquito con mi película anterior, "Tangerine", en la que, para algunos roles secundarios, hicimos el casting por Vine y YouTube. Iba con una mente abierta al respecto, pero no nos metimos a Instagram buscándola. En realidad, la encontramos por casualidad. Vi un potencial en ella, no te puedo decir exactamente qué fue, pero su persona, su energía me cautivaron, y me hizo reír y eso es algo que buscaba para el personaje de Haylle. Era una apuesta 100% en verde porque nunca había actuado antes. Mi coach de actuación, Samantha Quan, trabajó con ella muy de cerca. No solo en preproducción, si no todos los días, para que llegara a ese punto en que pudiese sostenerse sola con Williem Dafoe al lado. Estoy tan orgulloso de su proceso, porque de verdad se lo tomó en serio. Estaba muy, muy, muy motivada y se dio el tiempo de aprender.

EL NUEVO-NUEVO HOLLYWOOD. Sean Baker ha sido mencionado como parte de los directores que están mostrando una nueva cara de Hollywood. Al lado de realizadores como los hermanos Safdie -Benny y Josh-, quienes brindaron el año pasado la potente "Good Time", que compitió en Cannes por la Palma de Oro; y Jordan Peele, el director nomimado al Oscar este año por su fantástica "Huye", Baker es miembro ilustre de un club de cineastas jóvenes, con mirada punzante y crítica.

-Mencionas a los hermanos Safdie y Jordan Peele y el solo hecho de estar nombrado en su compañía es un honor para mí. Creo que están haciendo un excelente trabajo. Lo de Jordan Peel es muy interesante, ¿sabes? el rol social que juega, porque básicamente está entregando una pieza de cine muy, muy entretenida a la audiencia en forma del género de la comedia de horror en "Huye", pero al mismo tiempo está hablando sobre las relaciones raciales. Eso es muy, muy inteligente. Me recuerda a la nueva ola de Hollywood en la época de los 60 y principio de los 70, ahí había críticas sociales, y pienso que estamos todos muy influenciados por (directores como) Robert Altman ("MASH") y Hal Ashby ("Desde el jardín"). Y esa etapa marcó un cambio, porque usaba este gran medio del cine para tener un impacto social y algo de eso veo en los 80 y 90, pero creo que va a volver ahora. Existe la necesidad, especialmente en nuestros tiempos políticamente turbulentos.

"El proyecto Florida" tal vez sea la película más masiva de este artista que trabaja más por convicción de sus ideas, que por lograr grandes ganancias económicas.

-Una de las batallas de un cineasta independiente es que nunca sabes si vas a hacer otra película. El futuro siempre es algo que da miedo, porque no sabes si la próxima vez conseguirás financiamiento, etc., así que el hecho de que esta película esté logrando acaparar la atención de la gente me está abriendo puertas y me reconforta saber que al menos voy a poder pagar mi arriendo por los próximos años. O sea, estas películas no te hacen rico, son películas independientes, solo se trata de poder seguir con tu arte. Y supongo que he llegado a un punto en que puedo estar seguro de que podré seguir haciendo esto al menos por un par de películas más...

-Leí que solo tienes que mantener a tus chihuahuas...

-Bueno, sí, soy yo, mi polola y mis chihuahuas. Lo maravilloso de mi pareja, Samantha Quan, es que trabajamos juntos. Ella era la coach de actuación en la película (...) Tengo una buena vida. No necesito una gran casa en Brentwood, no necesito un auto lujoso, yo tengo una linda vida con mi novia y tenemos buena mesa... Podemos subir cerros, hacer ejercicios, divertirnos, ver películas, viajar, así que nuestra vida es bastante buena. Creo que hay personas que piensan que es un sacrificio porque creen que estamos todos anhelando ser multimillonarios, en este mundo y en especial en Estados Unidos, donde lamentablemente veneramos a los ricos. Por eso Trump está de presidente. Por supuesto que es agradable vivir de manera cómoda, pero soy feliz de poder hacer mi arte y que me paguen por hacerlo. Eso es una bendición en un mundo donde hay tanta gente que sufre y que enfrenta adversidades cada día. Yo siento que no he hecho ningún sacrificio. Me siento tremendamente afortunado, bendecido y privilegiado en mi posición.

De hecho, este cineasta de los detalles, de lo cotidiano, de lo invisible a los ojos del Hollywood más oficial, y que siempre va a un paso más allá, cree que el cine puede servir en términos sociales.

-El cine me ha abierto los ojos durante los años. Creo que me ha educado. Y mis películas son una respuesta sencilla a lo que a mí me gustaría ver más. Si tenemos más empatía en nuestro mundo, hacia nuestros personajes, si tenemos más sensibilidad en nuestro trabajo, creo que el cine es una herramienta tan potente, que puede ayudar a que el mundo sea un lugar mejor, puede cambiar el mundo. Y si puedo hacer mi pequeño aporte a través de este arte, entonces creo que he hecho lo correcto con mi vida.

"El cine me ha abierto los ojos durante los años. Creo que me ha educado. Y mis películas son una respuesta sencilla a lo que a mí me gustaría ver más", dice el director Sean Baker.

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