Han pasado casi 20 años desde que Chile se empapeló con carteles de la candidatura presidencial de Hernán Büchi y no se le nota mucho el paso del tiempo en la cara. Sigue con el corte de pelo desordenado, la mirada atenta y las manos nudosas de los deportistas.
Y por dentro, continúa en la misma cruzada que lo llevó al protagonismo en los ochenta y que empezó mucho antes. Cuenta que cuando era niño su padre lo llevaba a caminar y le iba mostrando las poblaciones- "de una pobreza que ya no se ve ahora"- y que él se preguntaba ya entonces cómo se podía hacer para mejorarles la vida a esas personas, "que tuvieran agua, un baño".
Y aunque esa miseria se ha superado, a su juicio no lo estamos haciendo muy bien para realmente despegar. Durante esta entrevista cuestiona una y otra vez políticas públicas recientes, como la reforma previsional o cómo se dio el debate por el IVA a la construcción.
Hay una ideología detrás de todo esto, dice, que prefiere darle el poder al Gobierno en desmedro de las personas. Por eso le pide a la Presidenta Bachelet que haga un mejor Estado y que sólo una vez cumplido esto, empiece a discutir el tener más Estado.
La próxima semana relanzará un libro donde resume cómo fueron las reformas económicas que vivió en su paso por el Ministerio de Hacienda entre 1985-1989.
"La moraleja más importante para mí es que las decisiones que se toman hoy, tienen un efecto muchos años después. Desgraciadamente, al que está en el rol político del día a día, lo que le interesa es que la población le amerite a él lo bueno que está pasando y que le eche la culpa a otro de lo malo que está pasando".
La profundidad de la crisis subprime, la recesión
Recesión en EE.UU.: "Tengo esperanzas en las personas que están a cargo. La intervención de Trichet (presidente del Banco Central Europeo) a fines de 2007, cuando pasa US$ 500.000 millones para refinanciar a los bancos y la intervención de la Reserva Federal de EE.UU. hace dos semanas, muestra que están claros que no se pueden quedar de brazos cruzados".
"Recesión es cuando se generaliza una disminución de la actividad con impacto importante en el empleo y la capacidad ociosa. Estados Unidos va a estar al borde de eso, va a crecer menos porque por un tiempo estaba creciendo más allá de sus medios".
Stiglitz y la peor crisis desde los 30: "Respeto a una persona que tiene un Premio Nobel, pero no tengo mucho aprecio por sus opiniones porque en el último tiempo busca llamar la atención. Si fuera así, tendríamos caídas del producto de 20 y 30%. Económicamente yo creo que no debiera ni parecerse a la crisis de los 30 y eso espero, porque no sabemos lo que nos espera si llegara a parecerse, o sea, nos cambia la historia a todos".
Argentina hoy: "Los argentinos no están consumiendo per cápita hoy más que en 1998 y desde el punto de vista de los incentivos tienen una visión antimercado. Son la extrapolación de lo que se insinuó en Chile, de que hay que quitarle a las empresas para ayudar a la población y no ayudar a que creen riqueza y empleo. Con las medidas tomadas en el pasado se hace difícil la generación de energía, lo que pasa la cuenta en el abastecimiento".
-Asumió en Hacienda en un momento complejo. Su predecesor (Luis Escobar Cerda) le decía a los industriales "hay hambre en las poblaciones". No había gasa en los hospitales...
"Me tocó llegar en un momento en que parecía que el camino se había interrumpido. Del optimismo de haber hecho una serie de cambios que iban a generar una situación nueva de crecimiento económico y estabilidad a futuro, de repente nos encontramos frente a un abismo".
"Cuando renuncié al Ministerio de Hacienda, el ánimo era totalmente distinto, sin perjuicio de que seguía habiendo problemas, como todas las cosas en la vida. Pero habíamos recuperado el país. Hicimos algo que valía la pena, una base sólida".
- ¿Cómo ve hoy la situación?
"En los últimos años nos hemos visto beneficiados de lo que Greenspan ha llamado la "desinflación mundial", con la incorporación de China y otros países a la economía de mercado que comienzan a fabricar productos a precios muy bien aprovechados por las empresas para traspasárselo a los consumidores, en bienes de consumo, autos, la ropa de las grandes tiendas. Ese proceso de "desinflación" se revirtió y encuentra a las autoridades en varios problemas".
-En ese contexto, ¿es hoy una buena idea mantener la regla fiscal estructural?
"Yo le doy más importancia a ver cuál es el gasto fiscal. El Gobierno ayuda, pero marginalmente, para generar estabilidad, pero el progreso no lo hacen los gobiernos, lo hacen los individuos".
"El Gobierno tiene que preocuparse de hacer lo mejor con los recursos mínimos y una vez que está seguro que va a hacer algo muy bueno agregando más, recién entonces hacerlo. Hoy día es al revés. La Presidenta dijo el otro día: "quiero más Estado". Por suerte le agregó "un mejor Estado". Yo pediría que por favor haga mejor Estado y una vez que nos asegure que tiene un mejor Estado, recién empecemos a discutir más Estado".
-Pero el Estado ahora sí que tiene. ¿Qué hacer con los US$ 21 mil millones de excedentes del cobre depositados fuera?
"Nunca se pueden usar de un día para otro. Más que decir cómo se gasta, yo plantearía cuál sería la estrategia fiscal, dado esta nueva situación en la que Chile ya hizo una ganancia de capital".Precio del dólar: "Creo que hoy día estamos corriendo serios riesgos"
-¿Cree que se está haciendo necesaria una intervención cambiaria en el país?
"Creo que el tipo de cambio es un precio clave. Eso no quiere decir que uno pueda ponerlo donde quiera. La historia muestra que si los países se van a equivocar, es mejor equivocarse para tener una moneda subvaluada, que una sobrevaluada".
"Me da lo mismo si es el Banco Central o si el Gobierno decide reservar fondos adicionales. Pero creo que debe estar atento y no dejar que el tipo de cambio se desplace por mucho tiempo de un valor de largo plazo".
-¿Cuál es ese valor de largo plazo?
"Creo que hoy día estamos corriendo serios riesgos. Ahora, es un dólar volátil. Si dura dos meses o un mes no va a ser una cosa del otro mundo".
"El otro día decía un economista en la prensa que estaba muy preocupado con un dólar bajo los $500. Tiendo a coincidir".
"El dólar es libre, no lo vamos a poder cambiar, pero eso no quiere decir que vamos a ser el país que más revalúa su moneda".
-¿Como evalúa la política monetaria del Banco Central con una inflación en 8,1%?
"Siendo esos los resultados no ha sido lo suficientemente eficaz. Hay razones para eso".
"Le está tocando bailar con la fea. El mundo ya no es desinflacionario y además nos están pegando los commodities. Más que una falta de habilidad del Central, se suma una realidad externa y el hecho de que el fisco de alguna forma está tratando de aumentar la demanda en una economía creciendo algo sobre 3%".
"La actividad económica aparece como la más afectada, no así la demanda que sigue creciendo fuerte. El gasto fiscal crece casi dos veces el producto y todo eso hace más difícil la tarea del Banco Central. Por la premura con que el ministro de Hacienda decide bajar temporalmente el impuesto a los combustibles, por ese lado está tratando de ayudar. Y el dólar le está ayudando a la inflación".
.
"Actuaría por el lado de un paquete razonable de medidas en la línea de hacer más fácil la inversión, viendo en qué impuestos actuar y donde puede gastar mejor el Gobierno y de forma que rinda".
"Hoy día el Gobierno está haciendo uso paulatino de los recursos, pero no está haciendo full uso de la bonanza externa y eso es bueno".
"En lo que discrepo es que si bien no podemos volvernos locos gastando de un día para otro, sí debiéramos sentar las bases para que Chile se vuelva una máquina de crear riqueza, que todos estén pensando en cómo invierten, cómo emplean y cómo usan esta oportunidad".
"Desgraciadamente el Gobierno no la está aprovechando porque no cree que la riqueza la crean las empresas, la crean las personas trabajando y lo que vemos crecientemente son problemas para crear e invertir".
-La reforma previsional de los 80 marcó un hito en el desarrollo del ahorro, la inversión y el mercado de capitales. ¿Aparte del Pilar Básico Solidario, que otros riesgos advierte en la reforma 2008?
"Como lo digo en el libro, importan las ideas, pero también los detalles. No es cierto que Chile no tenía un pilar solidario, teníamos pensiones asistenciales desde fines de los 70 y comienzos de los 80. En las pensiones los cambios toman una generación y vamos a terminar en que al final todos los chilenos creen que tienen derecho a que el gobierno graciosamente les tiene que entregar una jubilación aunque no hayan hecho un esfuerzo. Eso destruye los incentivos, destruye el ahorro y al final destruye la economía. Y hay muchas otras cosas que van a generar problemas, como el seguro de invalidez y sobrevivencia".
-Pero si pensamos que la reforma previsional fue aprobada unánimemente por la derecha. ¿Cambiaría realmente esta tendencia de dejar la riqueza en manos de las personas y no del Estado en un eventual gobierno de la Alianza?
"No me cabe duda. Lo que pasa es que en Chile básicamente el 80% del poder lo tiene el Presidente, los parlamentarios tienen un poder muy limitado y dentro del Parlamento, la oposición no es mayoría".
"Hoy día hay una situación rara en que uno podría decir que la oposición es mayoría, pero es en parte alianza y en parte no alianza. Lo único que le cabe a la Alianza es tratar de moderar y de reencausar lo que sea efectivo".
"Creo que la Alianza es una diferencia y creo que a Chile le haría tremendamente bien tener una alternancia en el poder. Me parece que no se va a consolidar la democracia chilena, mientras no haya alternancia en el poder. Que quienes hoy día están en el poder, demuestren que después de veinte años son capaces de hacer una oposición tan razonable como ha sido por dos décadas la oposición chilena".
APOYA BAJAR EL IVA SI ÉSTA ES LA ÚNICA VÍA ACEPTADA DE REDUCIR IMPUESTOS
Su ideal es una estructura tributaria pro inversión, pero: "Prefiero que las platas las tengan las personas a que las tenga el Gobierno".
-¿Qué cambios tributarios propiciaría y cómo se condicen con el efecto inflacionario de rebajas impositivas?
"Hay que separar la coyuntura del largo plazo. En esto último, a Chile le harían bien cambios que faciliten la inversión y la productividad. No haría cosas precipitadas que afecten la coyuntura".
-¿Ayudaría una rebaja del IVA?
"Me tocó rebajar el IVA desde el 20 al 16%. Como decía Churchill, "todos los impuestos son malos", pero creo que el IVA es el menos malo de todos y por eso busqué acomodos de impuestos que impactaran más directamente en que la economía funcionara".
"Esto se hizo luego de avanzar en una estructura tributaria que bajó impuestos a la inversión. Pero si me preguntan y hubiera acuerdo político para bajarlo hoy, aunque en el muy corto plazo tuviera efectos macroeconómicos que no le gusten a algunos y es la única rebaja de impuestos en que puede haber acuerdo, yo preferiría hacer la rebaja que no hacerla".
-¿Por qué esa opción?
"Prefiero que las platas las tengan las personas, a que las tenga el Gobierno. Al revés de lo que ve la Presidenta, creo que las personas saben mejor qué hacer y por último, lo hacen con más cuidado".
"Ojalá que ese poder esté más limitado en cuántos son los recursos que tiene. Hoy día la Presidenta maneja el 40% de nuestras decisiones de plata, porque si mira las empresas públicas y a las municipalidades, que al final tiene que ver con los presupuestos que ella propone, termina haciendo eso. Eso es una cosa increíble".
-¿Ve efectos negativos en la economía por el cambio en el descuento del IVA a la construcción?
"La construcción no tenía IVA porque era una inversión de largo plazo y no un consumo. Pero cuando se invertía en construir una central eléctrica, por ejemplo, el IVA del fierro y otros materiales quedaban como costo y no se podían devolver y eso era un obstáculo a la inversión. Por eso se le puso el mecanismo de IVA que permitiera la devolución. Yo creo que el cambio tiene un efecto negativo, pero más que eso, lo que me preocupa es que no haya habido la visión de tomar esta oportunidad para decidir abaratar las viviendas para los más modestos".