martes, 25 de marzo de 2008
Reuters
El candidato presidencial dijo que estaba abierto a un rango de soluciones para resolver los problemas en el sector inmobiliario y pidió que el Gobierno convoque rápidamente a prestamistas hipotecarios y contadores para comenzar a enfrentar las turbulencias financieras.
SANTA ANA.- El candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, John McCain, prometió el martes encontrar una solución a la crisis inmobiliaria que está golpeando a la economía del país, pero sus oponentes demócratas lo criticaron por no respaldar una propuesta específica.
McCain, que ha sido criticado por su presunta debilidad en temas económicos, dijo que estaba abierto a un rango de soluciones para resolver los problemas en el sector inmobiliario y pidió que el Gobierno convoque rápidamente a prestamistas hipotecarios y contadores para comenzar a enfrentar las turbulencias financieras.
"No jugaré a la política en un año electoral con la crisis inmobiliaria. Evaluaré todo en lo que respecta a ver si sería nocivo o útil en nuestros esfuerzos para lidiar con la crisis que enfrentamos ahora", afirmó el senador por Arizona, en un discurso ante líderes empresariales en el sur de California.
"Consideraré todas y cada una de las propuestas basándome en sus costos y sus beneficios. En esta crisis, como en todas las que podría enfrentar en el futuro, no permitiré que el dogma supere el sentido común", agregó.
McCain se aseguró la candidatura republicana para enfrentar al ganador de la carrera demócrata, Barack Obama o Hillary Clinton, en la elección presidencial de noviembre.
Los demócratas han recordado antiguas declaraciones suyas en las que admitía que sabía menos de economía que de política exterior y de seguridad nacional, en un intento por pintarlo como alguien riesgoso para encabezar la Casa Blanca en momentos en que la economía enfrenta una etapa de incertidumbre.
McCain recibía las mismas críticas de los republicanos antes de alzarse con la nominación.
El martes, el discurso de McCain no convenció a los demócratas, quienes criticaron su incapacidad de proponer un plan para enfrentar los problemas inmobiliarios y compararon su postura con la del presidente George W. Bush.
"En lugar de ofrecer un plan concreto para enfrentar la crisis en todos sus niveles, McCain prometió el mismo acercamiento que usó el presidente Bush para colocarnos en esta crisis", dijo el jefe del Partido Demócrata, Howard Dean.
Por otra parte, el portavoz de Obama, Bill Burton, señaló que McCain "sugería que la mejor manera de enfrentar la crisis inmobiliaria es sentarse a ver qué sucede, lo que evidencia que seguiría con las fracasadas políticas económicas del presidente Bush".
Buscando moderar esas críticas, McCain destacó en su discurso los problemas que enfrenta el sector inmobiliario estadounidense y dijo que no tomaría medidas que recompensen a aquellos que habían actuado "irresponsablemente" y habían alimentado las turbulencias en los mercados.
"Siempre he estado comprometido con el principio de que no es tarea del Gobierno rescatar y recompensar a quienes actúan en forma irresponsable, sean grandes bancos o pequeños deudores", sostuvo.
La asistencia del Gobierno al sistema bancario debería basarse solamente en prevenir el riesgo sistémico que pondría en peligro a todo el sistema financiero y a la economía", dijo McCain.
El candidato indicó que el Gobierno podría hacer dos cosas ahora mismo: convocar a encuentros separados de contadores y de prestamistas hipotecarios para comenzar a delinear soluciones a la crisis inmobiliaria.
El discurso de McCain se conoce apenas un día después de que Clinton ofreció un plan en Pensilvania para moderar la incertidumbre en los mercados inmobiliarios.
Clinton y Obama, quienes se encuentran enfrascados en una reñida lucha por la nominación demócrata, han competido por ser considerados como la persona más confiable para manejar la economía ante una posible recesión y en medio de una crisis en los mercados de vivienda y finanzas.
