jueves, 13 de marzo de 2008
Reuters
La medida venezolana también obliga a que al 2013 un 50% de los componentes de los vehículos producidos en ese país sean fabricados localmente, lo que impactará a la exportación de autopartes de Colombia.
BOGOTÁ.- El sector automotor de Colombia comenzó a sentir el rigor de una restricción a la exportación de vehículos hacia Venezuela, y anunció despidos de trabajadores ante las expectativas de una fuerte caída en los ingresos por las menores ventas al país vecino.
La Asociación del Sector Automotor y sus Partes, Asopartes, dijo que por un decreto del Gobierno de Venezuela, que redujo a partir de este año los cupos de importación, las ventas de Colombia a ese país caerán de 60.000 vehículos el año pasado a unas 24.000 unidades en el 2008.
Como consecuencia de la medida, el presidente de la Compañía Colombiana Automotriz (CCA), Fabio Sánchez, que ensambla los vehículos Mazda, anunció el despido a partir de abril de 440 personas de una nómina total de 1.300.
El directivo estimó que los despachos de la CCA hacia Venezuela pasarán de algo más de 17.000 vehículos el año pasado a unas 5.000 unidades en el 2008.
"Nuestra producción tuvo que ser reducida en 40% y en términos de ventas, las exportaciones a Venezuela representaron a la compañía ingresos por US$304 millones el año anterior, que se verán reducidos a algo menos de US$90 millones este año", dijo Sánchez a Caracol radio.
El presidente de Asopartes, Tulio Zuluaga, dijo que entre el ensamble de vehículos y la comercialización de autopartes, la industria automotriz colombiana obtuvo ingresos de casi US$7.000 millones en el 2007 y representó un 5,25% del Producto Interno Bruto (PIB) de la nación.
Aunque las otras dos ensambladoras del país, Sofasa -que fabrica las marcas Renault y Toyota-, y Colmotores, de la gigante General Motors, aún no han anunciado despidos, fuentes de la industria estimaron que las compañías eliminarían uno de tres turnos de trabajo, equivalente a entre 800 y 1.000 empleados.
A su vez, las fuentes calcularon que entre 3 y 4 trabajadores serían despedidos en la cadena de autopartes por cada empleado que deja las ensambladoras.
La medida venezolana también obliga a que al 2013 un 50% de los componentes de los vehículos producidos en ese país sean fabricados localmente, lo que impactará a la exportación de autopartes de Colombia.
A buscar mercados
No obstante, Zuluaga confió en que la caída en las ventas hacia Venezuela se pueda compensar con la venta de unidades en el mercado local y a otros países de la región.
"Creemos que una parte lo puede consumir el consumo interno y otra parte con exportaciones, se están abriendo las perspectivas hacia países centroamericanos y del sur como Bolivia, Perú, Chile, Argentina y Brasil, para que realmente no nos afecte más ninguna crisis", dijo Zuluaga a Reuters.
Las ventas de vehículos nuevos en este país andino pasaron de 60.000 unidades en el 2002 a 258.000 el año pasado, alentadas por una recuperación de la economía local y las bajas tasas de interés en ese periodo.
No obstante, Sánchez no es tan optimista.
"Es una cifra demasiado importante que es muy difícil que el mercado local la asimile", dijo el directivo de la CCA.
"(Buscar otros países) es el paso natural a seguir, pero es un proceso que toma mucho tiempo, acceder con nuestro producto a mercados ya de por sí muy competidos es algo verdaderamente complejo", añadió.
