martes, 11 de marzo de 2008
ALEJANDRA ARANDA H. / Socia-Consultora Humanitas Head Hunting
Economía y Negocios
Un estudio de la Cepal muestra que, de cada 1.000 científicos latinoamericanos que llegan a Estados Unidos, 191 son argentinos, 156 chilenos, 138 panameños y 100, peruanos. Con el tiempo, la migración latinoamericana ha disminuido y la asiática es la que ha predominado.
Desde los años 60, la Cepal estudia la emigración de talentos desde Sudamérica, tratando de relacionarla y ver su efecto en el desarrollo.
En general, estos estudios se enfocan hacia el mundo de los científicos, que generalmente emigran para siempre. Es así como un estudio de la Cepal muestra que, de cada 1.000 científicos latinoamericanos que llegan a Estados Unidos, 191 son argentinos, 156 chilenos, 138 panameños y 100, peruanos. Con el tiempo, la migración latinoamericana ha disminuido y la asiática es la que ha predominado.
En este mismo estudio de movilidad se muestra la cantidad de ejecutivos sudamericanos transferidos desde las filiales a las matrices: el año 1996, era 10.437 y el 2002 fue de 37.082. Los países con mayor expatriación eran Colombia, Argentina y Venezuela, lo que coincide con el tamaño de la población y con ciertas crisis internas.
Las empresas chilenas que se abren al mundo también han expatriado ejecutivos, principalmente a Argentina, Perú, México, Estados Unidos y Europa; también en los últimos años a Colombia y al Lejano Oriente, por la apertura de oficinas comerciales.
Al mismo tiempo, hemos recibido cada vez más extranjeros, generalmente relacionados con compañías internacionales.
En el futuro, como respuesta a la creciente complejidad de un mundo más diverso, habrá una mayor demanda por parte de las empresas de diversidad, flexibilidad e innovación en sus ejecutivos. La capacidad de expatriación va a ser un elemento diferenciador importante.
