La tecnología en las salas de clases vuelve el aprendizaje menos monótono y aburrido
lunes, 11 de diciembre de 2017
M. Cordano
Educación
El Mercurio
Esto siempre que los profesores estén capacitados para sacarles provecho a estas herramientas, advierte el especialista, quien cree que no basta con solo entrenar a quienes enseñan informática.
Hace casi veinte años, dos amigos comenzaron un proyecto que revolucionaría la forma de acceder a la información. "Nació desde la sala de clases, de la mano de dos personas muy curiosas", comenta Rodrigo Pimentel respecto del nacimiento de Google, la compañía donde se desempeña como director del área de educación para Latinoamérica. La historia se la contó a los alumnos de 5° básico a 3° medio del colegio Jorge Alessandri Rodríguez -establecimiento que forma parte de la red de colegios SIP-, que la semana pasada lo escucharon mientras exponía sobre las ventajas de llevar la tecnología al aula. "Siempre que sea con una mirada enfocada en los estudiantes. Por eso es fundamental capacitar a los profesores", explica el ingeniero brasileño, dando cuenta de que no sirve dotar a un colegio con computadores si a los docentes no se les enseña a sacarles provecho. Cuando habla de profesores, Pimentel va más allá de aquellos que solo enseñan sobre informática o tecnología. "Tenemos toda una inclusión digital con los celulares, entonces no podemos obviar y no incorporar la tecnología a todo el salón de clases. Si hablamos de una cultura de innovación, no podemos cerrar las opciones; las Matemáticas o las clases de Lenguaje no pueden quedar fuera", enfatiza. El director de Google for Education para América Latina escogió visitar un colegio SIP porque la red apunta a ser un referente en el uso de la tecnología como herramienta educativa. Es por eso que sus profesores se han ido capacitando y actualmente incorporan a sus clases herramientas como Classroom (que es gratuita, ingresando en https://classroom.google.com). Entre otras cosas, Classroom permite crear una clase virtual que se puede compartir con los alumnos. Para unirse solo basta con agregar un código que se genera de forma inmediata y que el profesor comparte. "A través de la página se pueden crear preguntas o tareas, poniéndoles un plazo de vencimiento que se sincroniza con el calendario de los alumnos. A las clases que se van armando se les puede incluir texto, adjuntar archivos o pegar enlaces. Y cada vez que hay cambios, a los niños les llegan notificaciones", comenta el profesor Julio Vieyra, quien a través de una pizarra interactiva hizo una demostración en vivo de su funcionamiento, agregando que a los profesores los ayuda a ordenarse y ahorrar tiempo. "No hay que estar preocupado de estar imprimiendo, de estar separando tareas. Con la tecnología todo se organiza de forma mucho más intuitiva", dice. A los profesores en un comienzo "se les hace difícil, pero luego van notando los beneficios; ven cómo llegan de forma más rápida a los objetivos, cómo las herramientas tecnológicas los ayudan a descomprimir tiempo", comenta Lily Ariztía, gerente de la red de colegios SIP. "Muchos estudiantes están aburridos en la sala de clases. Tenemos que cambiar eso. Y la tecnología es una herramienta que ayuda a crear una cultura de innovación", dice Pimentel, quien agrega que encantar a los estudiantes con propuestas novedosas es especialmente importante en una región como la nuestra, donde las "tasas de abandono escolar son altísimas".
